Dos nuevos derroteros del galeón de Manila (1770-1773)

No pretendernos abarcar en conjunto la historia de esta línea de navegación, de la que se han ocupado otros autores, sino tan sólo estudiar dos cuestiones concretas, relativas a otros tantos intentos de modificar la derrota, realizados ambos en el siglo XVIII: No son éstos los primeros, pues ya en 1613 el Procurador General de Manila, Hernando de los Ríos Coronel, había propuesto que el galeón, en lugar de contornear por el sur la isla de Luzón, siguiese la ruta del norte, doblando los Cabos Bojeador y Engaño. Pero en 1730 aún no se había hecho nada práctico en este sentido, aun que las alusiones a "los peligros del Embocadero" se multiplican, en todas las relaciones de viajes y diarios de a bordo. Para evitarlos, se buscaron nuevos caminos no sólo por el norte de Luzón, como ya se ha indicado,sino también por el sur del Archipiélago FilipinoPeer reviewe

Algunas notas sobre cordobeses en las Indias del siglo XVI

Tomo I ; págs. 113-13

Antonio Fernández de Roxas y su "Topografía de la ciudad de Manila"

La "Topographia de la Ciudad de Manila" delineada por Antonio Femández de Rojas, constituye un documento gráfico de excelente calidad para conocer lo que era la capital de Filipinas en el primer tercio del siglo XVIII. Si la comparamos con los planos de la época, por ejemplo con el dedicado a Felipe V, que se conserva en el Archivo de Simancas y con el que en 1739 envió el gobernador Valdés Tamón queda patente la fidelidad con que se reflejan en ella hasta los más pequeños detalles de la ciudad y su contornosPeer reviewe

Un Clérigo aragonés en América y Filipinas: Pedro Cubero Sebastián y su "peregrinación"

Vol. 1: La corona de Aragón y el nueno mundo: del Mediterráneo a las Indias. 1998. ISBN 84-7753-707-0«La figura del aragonés Pedro Cubero y Sebastián no digo que esté olvidada sino que es desconocida. Y se trata de un hombre excepcional, inquieto, andariego, que dio la vuelta al mundo por tierra y por mar ( ... )>>. Ricardo del Arco escribió estas palabras en 1947 Y al cabo de casi medio siglo, siguen teniendo plena actualidad. Lo poco que sabemos de este viajero nos lo ha dicho él mismo a lo largo de sus relatos. Nació el año 1645 en El Frasno, «uno de los lugares de la comunidad de CaIatayud». A mediados del siglo XIX, cuando Pascual Madoz escribía su obra, El Frasno tenía 154 vecinos, según él 232 almas, porque aplica el coeficiente 2,16. Su única parroquia era la Asunción y había una ermita dedicada a Nuestra Señora de Pietas. En sus campos se cultivaban vides, olivos y cereales, y tenía ganado lanar. Es de suponer que, si esto era El Frasno entonces, en el siglo XVII sería aún menor su importancia y más pequeña su población.Peer reviewe

Diego García Panes. Un autor olvidado

En la Biblioteca Nacional de México se conserva inédita y por desgracia no completa, la obra de un modesto militar que pasó la mayor parte de su vida en el virreinato novohispano, desempeñando numerosos trabajos y comisiones de su profesión a la vez que dedicaba sus ocios a componer el Theatro de Nueva España en su gentilismo y conquistaPeer reviewe