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    Evolución de la función renal en una cohorte de pacientes con insuficiencia cardíaca en un período de 12 meses.

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    La insuficiencia cardíaca en nuestro medio supone una causa frecuente de hospitalización, que se asocia en muchas ocasiones con un empeoramiento de la función renal, el denominado Síndrome Cardiorrenal, lo que a su vez conlleva un aumento en el número de reingresos y de mortalidad. El objetivo de nuestro estudio fue analizar a partir de una cohorte de 270 pacientes procedentes de la planta de Medicina Interna del HCU de Zaragoza con diagnóstico ya establecido de IC, el deterioro de su función renal mediante un seguimiento en consultas durante un año así como dilucidar los mejores métodos para pronosticar de manera precoz esta disminución de la FR. Para ello, se emplearon distintas fórmulas de cálculo del FRG tomando en todo momento como punto de corte un FRG<60ml/min/1,73m². En cuanto a los marcadores biológicos, se estipuló el punto de corte recomendado actualmente por las Guías de Práctica Clínica actuales; así como para el resto de los parámetros analíticos. A pesar de encontrarnos con una población con muchas comorbilidades de base, pudimos constatar que aquellos pacientes con descenso del FRG, eran un subgrupo significativamente más envejecido y con mayor proporción de tabaquismo, HTA, anemia, DM 2 y de hiperpotasemia e hiperuricemia. A la hora de detectar el deterioro del FRG, observamos como CKD-EPI posee más sensibilidad que MDRD (que tendía a una infraestimación de la función renal). Además, se apreció como la ecuación CKD-EPI con Cistatina C poseía incluso mayor poder de discriminación que las anteriores a la hora de estratificar el grado de deterioro renal ya que estimaba mayores porcentajes de reingreso y éxitus en aquellos pacientes con FRG disminuido. Este parámetro junto con el biomarcador cardíaco NT-proBNP fueron significativamente mayores en los pacientes con IR; así como en aquellos que más tarde sufrieron reingreso y/o éxitus en menos de un año. Por ello, los resultados de este estudio perfilan a ambos parámetros como marcadores más precisos a la hora de predecir la pérdida de la función renal.<br /

    Influencia de los trastornos de ritmo tipo fibrilación auricular y/o trastornos de la conducción intraventricular tipo bloqueo de rama en los pacientes ingresados con insuficiencia cardiaca: Estudio descriptivo de morbimortalidad

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    La insuficiencia cardíaca (IC) es un síndrome complejo y prevalente. En general, afecta a sujetos de mayor edad con comorbilidad asociada. En el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa supone más del 10% de los ingresos de los servicios de Medicina Interna y es un motivo frecuente de reingreso y mortalidad. Los trastornos de ritmo tipo fibrilación auricular (FA) y los de conducción intraventricular tipo bloqueo de rama son frecuentes en los pacientes con IC y su prevalencia aumenta con la edad y gravedad de la misma. La FA oscila del 10% en clases funcionales bajas de IC hasta un 40-50% en clases más avanzadas y los trastornos de conducción tipo bloqueo de rama están presentes en un tercio de los pacientes con IC siendo el bloqueo de rama izquierda (BRIHH) con un 25% el más frecuente. La influencia de trastornos de la conducción tipo bloqueo de rama y en especial del BRIHH en la IC es variable y depende del tipo de estudio realizado, pero parece que se relaciona con un peor pronóstico ya que se asocia a mayor reingreso y mortalidad. El papel de la FA en la IC en relación al pronóstico es más controvertido, hay estudios que la relacionan con mayor mortalidad y otros en los que la asociación desaparece tras el ajuste estadístico. La coexistencia de ambas alteraciones electromecánicas (FA y Bloqueo de rama) se han relacionado con mayor riesgo de mortalidad.La terapia de resincronización cardíaca (TRC) se desarrolla para optimizar el tratamiento de los pacientes con IC avanzada que padecen trastornos de la conducción intraventricular con el fin de mejorar su pronóstico. La hipótesis del trabajo y objetivos se basan en describir la población que ingresa con diagnóstico al alta de IC y determinar la influencia de los bloqueos de rama, fundamentalmente BRIHH y/o de la FA , y si empeora todavía más el pronóstico en el subgrupo de pacientes con criterios para TRC en ritmo sinusal o con FA.Se realizó un estudio de cohortes retrospectivo con seguimiento a uno año y cinco años sobre una muestra de 1107 de la que finalmente se seleccionaron 898 pacientes. La población a estudio tuvo una edad media de 76,4 con leve predominio del sexo femenino (53,3%). Las clases II y III de la NHYA fueron las más frecuentes con 48,6% y 35,9% respectivamente. En el descriptivo global destacamos que un 72% presentaba FA, el 21,5% tenía ritmo sinusal y un 25,6% BRIHH. Los reingresos oscilaron del 75,2% al año al 87,5% a los cinco años. La mortalidad global al año fue 12,4% y por IC del 7,35%, y a los cinco años fue del 49,3% siendo 32,5% por IC. Las clases funcionales de NYHA y AHA se asociaron estadísticamente (pEn relación con la presencia de FA, no se han encontrado asociaciones estadísticamente significativas para reingreso ni mortalidad en la muestra estudiada al igual que para la presencia de BRIHH que tampoco se ha relacionado con un peor pronóstico a corto y largo plazo con independencia del ritmo (sinusal o no sinusal).Al analizar los subgrupos de pacientes en ritmo sinusal con criterios para TRC versus no TRC, tampoco se han encontrado asociaciones estadísticas que indiquen un peor pronóstico en aquellos con criterios para TRC. En el caso de los pacientes con criterios de TRC vs no TRC pero en FA, si se han encontrado asociaciones estadísticamente significativas para reingreso al año (p=0,018) y cinco años (p=0,028) y con mayor mortalidad por IC a los cinco años (p= 0,033).Tras el ajuste multivariable, los factores que se asociaron con mayor reingreso a corto y largo plazo y con mayor mortalidad global a largo plazo fueron la clase III NYHA, Clase D AHA y la concentración plasmática de urea . Una concentración plasmática de sodio por el contrario se comportó como factor protector para el reingreso a corto y plazo y mortalidad global a cinco años. En el reingreso a cinco años, la presencia de HTA, EPOC y mayor diámetro de aurícula izquierda se asociaron con un peor pronóstico.En el análisis multivariable para la mortalidad global a corto plazo, la edad y clase III NYHA se relacionaron con peor un pronóstico. La edad, se mantuvo como factor de mal pronóstico para la mortalidad por IC al año y cinco años.El diámetro de aurícula izquierda también se mantuvo asociado a mayor mortalidad a largo plazo, y los criterios para TRC destacaron como relacionados con mayor mortalidad por IC a los cinco años.Nuestro estudio, con sus limitaciones, concluye que la pérdida de ritmo sinusal de nuestra muestra no se comporta como factor de mal pronóstico al igual que la presencia de BRIHH. Los pacientes con criterios para TRC son escasos y si además tienen FA tienen peor comportamiento clínico con un mayor reingreso y mayor mortalidad por IC a largo plazo.<br /

    ANÁLISIS RETROSPECTIVO DE LOS EVENTOS HEMORRÁGICOS TRAS EL ALTA POR UN EPISODIO DE INSUFICIENCIA CARDIACA EN PACIENTES ANTIAGREGADOS Y/O ANTICOAGULADOS

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    INTRODUCCIÓN La insuficiencia cardiaca (IC) es un síndrome clínico que aumenta con la edad siendo por ello el principal motivo de ingreso hospitalario en mayores de 65 años. La fibrilación auricular es la arritmia más frecuentemente asociada a la IC por lo que es muy frecuente que ambos trastornos coexistan dando lugar a una situación de mayor riesgo tromboembólico. Para evaluar el riesgo embolico en los pacientes con FA se usa la escala CHA2DS2VASc, indicándose la anticoagulación en aquellos pacientes con una puntuación 2. Para la anticoagulación crónica se usan frecuentemente los antagonistas de la vitamina K (AVK), aunque sus múltiples limitaciones han promovido el desarrollo de nuevos fármacos, los nuevos anticoagulantes de acción directa (NACOs). MATERIAL Y METODOS Se han estudiado de forma retrospectiva 174 pacientes, que fueron ingresados con diagnóstico de insuficiencia cardiaca aguda en el servicio de Medicina Interna del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa desde febrero de 2013 hasta junio de 2018. Se han analizado datos demográficos, analíticos, antecedentes médicos, características clínicas, analíticas y terapéuticas, así como los eventos hemorrágicos en función del tratamiento buscando diferencias significativas entre ambos grupos de anticoagulantes.RESULTADOS Se encontraron diferencias estadísticamente significativas en la clase funcional de la NYHA y en algunas determinaciones analíticas y en el antecedente de enfermedad renal crónica. En 2012 se comenzaron a prescribir los NACOs, con un aumento del 12% en la prescripción en los 10 años de seguimiento. Se evidenciaron tasas similares de sangrados mayores y menores sin significación estadística. CONCLUSIONES En términos generales al anticoagulante que menor riesgo de sangrado presentó fue el Acenocumarol.<br /

    Factores asociados a ingreso en pacientes que permanecen en observación de Urgencias por insuficiencia cardíaca

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    Objetivo: Los ingresos hospitalarios por insuficiencia cardiaca (IC) han aumentado de forma sostenida y en la actualidad es una de las causas de ingreso más frecuentes en personas mayores de 65 años, con una considerable proporción de reingresos tempranos. La finalidad de este estudio es realizar una comparación del perfil de pacientes con IC que acuden al servicio de Urgencias del HCU Lozano Blesa y se espera como resultado preliminar identificar los criterios o factores pronóstico que determinan el ingreso hospitalario en pacientes con IC, permitiendo estratificar el riesgo y orientar la adecuación de ingreso en los pacientes con estas patologías que se presentan en los servicios de Urgencias. Métodos: Estudio descriptivo observacional retrospectivo, que analiza una muestra constituida por pacientes que acuden al Servicio de Urgencias del HCU Lozano Blesa y son diagnosticados de insuficiencia cardíaca (IC), diferenciando aquellos que son enviados de alta domiciliaria frente a los que ingresan. Los criterios de inclusión fueron: edad igual o superior a 18 años, haber acudido al Servicio de Urgencias y ser diagnosticados de IC en el periodo comprendido entre febrero y abril de 2016. Análisis estadístico: estudio descriptivo, utilizando el paquete estadístico SPSS 24.0 El estudio no precisa financiación para su desarrollo. Resultados: Se incluyeron a 82 pacientes (80 ± 10 años, 61% mujeres), de los que 68 (82,9%) acabaron ingresando y 14 (17,1%) fueron dados de alta a su domicilio. Dos variables se asociaron de forma significativa con la decisión final sobre el destino de estos pacientes: la dependencia funcional basal (índice de Barthel ≤ 60; p = 0,043), que se relacionó con una mayor probabilidad de ingreso y la presencia de edemas periféricos a la llegada a Urgencias (p = 0,031), que, en cambio, se relacionó con una mayor probabilidad de alta tras una breve estancia en observación. Conclusiones: Se concluyó que el “perfil de paciente” que acude al HCU Lozano Blesa y acaba ingresando es un paciente muy anciano, que presenta síntomas de IC congestiva mezclados con síntomas de hipoperfusión, presentando como factores precipitantes principales la anemia, crisis de HTA, incumplimiento terapéutico o factores desconocidos, con una forma de presentación asociada a hipotensión con shock o SCA y en cuyas pruebas complementarias, se objetivan peores resultados analíticos y existe una mayor prevalencia de hipertrofia ventricular izquierda, cardiomegalia, redistribución vascular, edema alveolar y derrame pleural. Palabras clave: Insuficiencia cardiaca; Urgencias; Factores pronósticos; Evolución; Escala de riesgo<br /

    Análisis de calidad de los informes de alta hospitalaria como garantía de continuidad de cuidados y herramienta de mejora en la atención médica a pacientes con insuficiencia cardiaca

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    INTRODUCCIÓN: El aumento progresivo de la prevalencia de la insuficiencia cardiaca (IC), principalmente en mayores de 75 años, unido al envejecimiento de la población, hacen que esta patología esté presente en un alto número de nuestros pacientes, lo que condiciona una serie de cuidados médicos y sociales y una atención tanto intra como extrahospitalaria. Esto pone de manifiesto la necesidad de una buena comunicación entre los distintos niveles asistenciales por los que va a circular el paciente, teniendo el informe de alta hospitalaria (IAH) como herramienta fundamental en esa transmisión de la información para garantizar un cuidados óptimo de los pacientes. Son varios los autores que han visto la necesidad de determinar cuáles son los pacientes con IC con alto riesgo de fallecimiento o reingreso tras una descompensación aguda, sobre los que intensificar los cuidados ambulatorios y hacer un seguimiento estrecho. Para ello se han propuesto escalas a partir de marcadores pronósticos conocidos, como el MUSIC Risk Score o las propuestas en los estudios EVEREST y OPTIMIZE-HF. Los reingresos hospitalarios por descompensaciones de patologías crónicas tienen su mayor incidencia durante los meses posteriores al alta hospitalaria, en el caso de la IC existe un 12-24% de reingreso a los 30 días. Varias son las causas que pueden motivar el reingreso: la hospitalización como expresión de los estadios finales de la enfermedad en algunos casos (que hace que los tratamientos se vuelvan ineficaces), un alivio incompleto de la sobrecarga de líquidos, una educación insuficiente del paciente tras el alta respecto a su enfermedad, la falta de implementación de tratamientos basados en la evidencia, y un plan de seguimiento tras el alta poco definido. Aunque algunos autores afirman que una explicación exhaustiva al alta, recogida en el IAH, con una monitorización ambulatoria del estado del paciente y un meticuloso seguimiento, reducen la frecuencia con la que los pacientes vuelven a urgencias o son rehospitalizados por una descompensación cardiaca, otros concluyen que los reingresos están determinados por la comorbilidad del paciente y la adecuación del tratamiento a las guías de práctica clínica. Numerosos estudios recogen datos acerca de la ausencia de información descrita en los IAH y de la recepción del informe por parte del médico de Atención Primaria (MAP). Un 10% de los IAH no llegan al MAP, un 20% no detalla el tratamiento al alta, un 14% no indica un pan de seguimiento, un 65% de los IAH no especifican las pruebas pendientes al alta. La pérdida de elementos importantes en el IAH relacionados con la IC, condiciona un impacto negativo en la transmisión de la información, y su consecuente repercusión sobre la morbilidad y el desarrollo posterior del proceso. Esta situación puede ser modificable mediante determinadas actuaciones dirigidas a sensibilizar y concienciar al personal sanitario del valor del informe de alta y de la importancia de su contenido. HIPÓTESIS DE TRABAJO: El IAH que se entrega a los pacientes con diagnóstico principal de ICC, adolece de la información necesaria e imprescindible desde el punto de vista diagnóstico, pronóstico y terapéutico, para proporcionar una continuidad de cuidados de calidad entre los distintos niveles asistenciales. Por lo tanto, se considera que los IAH son susceptibles de mejora. OBJETIVOS: Analizar si una intervención puntual sobre el personal sanitario involucrado en el cuidado de los pacientes con ICC es capaz de mejorar la calidad de la información recogida en el IAH. MÉTODOS: análisis retrospectivo de IAH con diagnóstico principal de IC correspondientes a los meses de enero a abril de 2007 del Hospital Clínico Universitario ¿Lozano Blesa¿ de Zaragoza, comunicación de los resultados en una sesión clínica con los facultativos de Medicina Interna de dicho hospital, y análisis prospectivo (tras la intervención) de los IAH con diagnóstico principal de IC correspondientes a los meses de octubre a diciembre de 2011. A partir de unos indicadores de calidad propuestos por la Joint Commission on Accreditation of Healthcare Organizations (JCAHO), la American Heart Association/American College of Cardiology y el Proyecto ACOVE, se ha elaborado un Conjunto Mínimo de Datos con la información considerada como imprescindible en un IAH. RESULTADOS: Análisis de la muestra previa a la intervención: la calidad de los IAH es baja, es decir, la información que se describe acerca de los datos considerados imprescindibles para un manejo adecuado de los pacientes con ICC es susceptible de mejorar. En este sentido, los datos más llamativos son los que hacen referencia al tratamiento: en un tercio de los IAH no se prescriben IECA o ARAII, los BB solo se prescriben en un tercio de los IAH, y solo en un 10% de los casos en los que no prescriben IECA/ARAII y BB hay explicación sobre esa decisión. En el caso de los IAH de pacientes con FA, más del 10% no reciben tratamiento anticoagulante y/o antiagregante, y solo en un 3% de estos se detalla la decisión de no hacerlo. Además, menos de la mitad de los IAH recogen la descripción de un ecocardiograma, y solo en un tercio se especifica la FEVI. La mayoría de los IAH no recogen la clasificación funcional de la NYHA. Teniendo en cuenta este hecho, en ninguna de los casos detallados en clases III y IV se prescribe el tratamiento correcto según las guías clínicas. Análisis posterior a la intervención: En conjunto, la sesión de intervención ha mejorado la calidad de los IAH, aumentando la cantidad de los datos recogidos considerados como imprescindibles (CMD). Pero a pesar de estas mejoras, hay datos cuya recogida sigue siendo deficitaria, como son la descripción de un ecocardiograma, la indicación de tratamiento con IECA/ARAII y BB y una justificación al hecho de no hacerlo, una explicación de la no anticoagulación/antiagregación en los casos de FA y la explicación de la monitorización del peso corporal. La intervención no ha conseguido mejorar el número de IAH que recogen la clase funcional, de forma que siguen siendo la mayoría los informes que no la especifican. De los casos en los que sí se detalla, para las clases funcionales III y IV tampoco hay tratamientos adecuados. Conjunto Mínimo de Datos: se han determinado 17 datos como imprescindibles para la realización de un IAH de una calidad adecuada, desde los puntos de vista de diagnóstico y tratamiento, y que satisfaga las necesidades del MAP, del paciente y de los especialistas que lo precisen consultar. A partir de los datos obtenidos se ha creado un modelo de IAH para pacientes con diagnóstico principal de IC que recoge la información necesaria para una continuidad de cuidados de calidad. BIBLIOGRAFÍA: 1. Rodríguez-Artalejo F, Banegas Banegas JR, Guayar-Castillón P. [Epidemiology of heart failure]. Rev Esp Cardiol. 2004 Feb;57(2):163-70. Spanish. 2. Anguita Sánchez M, Crespo Leiro MG, de Teresa Galván E, Jiménez Navarro M, Alonso-Pulpón L, Muñiz García J et al. [Prevalence of heart failure in the Spanish general population aged over 45 years. The PRICE Study]. Rev Esp Cardiol. 2008 Oct;61(10):1041-9. Spanish. 3. Mc Donald K. 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    Point-of-care lung ultrasound assessment for risk stratification and therapy guiding in COVID-19 patients. A prospective non-interventional study.

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    Background Lung ultrasound is feasible for assessing lung injury caused by coronavirus disease 2019 (COVID-19). However, the prognostic meaning and time-line changes of lung injury assessed by lung ultrasound in COVID-19 hospitalised patients are unknown. Methods Prospective cohort study designed to analyse prognostic value of lung ultrasound in COVID-19 patients by using a quantitative scale (lung ultrasound Zaragoza (LUZ)-score) during the first 72 h after admission. The primary end-point was in-hospital death and/or admission to the intensive care unit. Total length of hospital stay, increase of oxygen flow and escalation of medical treatment during the first 72 h were secondary end-points. Results 130 patients were included in the final analysis; mean±sd age was 56.7±13.5 years. Median (interquartile range) time from the beginning of symptoms to admission was 6 (4–9) days. Lung injury assessed by LUZ-score did not differ during the first 72 h (21 (16–26) points at admission versus 20 (16–27) points at 72 h; p=0.183). In univariable logistic regression analysis, estimated arterial oxygen tension/inspiratory oxygen fraction ratio (PAFI) (hazard ratio 0.99, 95% CI 0.98–0.99; p=0.027) and LUZ-score >22 points (5.45, 1.42–20.90; p=0.013) were predictors for the primary end-point. Conclusions LUZ-score is an easy, simple and fast point-of-care ultrasound tool to identify patients with severe lung injury due to COVID-19, upon admission. Baseline score is predictive of severity along the whole period of hospitalisation. The score facilitates early implementation or intensification of treatment for COVID-19 infection. LUZ-score may be combined with clinical variables (as estimated by PAFI) to further refine risk stratification

    Estimating the Prevalence of Cardiac Amyloidosis in Old Patients with Heart Failure—Barriers and Opportunities for Improvement: The PREVAMIC Study

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    Background: Cardiac amyloidosis (CA) could be a common cause of heart failure (HF). The objective of the study was to estimate the prevalence of CA in patients with HF. Methods: Observational, prospective, and multicenter study involving 30 Spanish hospitals. A total of 453 patients >= 65 years with HF and an interventricular septum or posterior wall thickness > 12 mm were included. All patients underwent a Tc-99m-DPD/PYP/HMDP scintigraphy and monoclonal bands were studied, following the current criteria for non-invasive diagnosis. In inconclusive cases, biopsies were performed. Results: The vast majority of CA were diagnosed non-invasively. The prevalence was 20.1%. Most of the CA were transthyretin (ATTR-CM, 84.6%), with a minority of cardiac light-chain amyloidosis (AL-CM, 2.2%). The remaining (13.2%) was untyped. The prevalence was significantly higher in men (60.1% vs 39.9%, p = 0.019). Of the patients with CA, 26.5% had a left ventricular ejection fraction less than 50%. Conclusions: CA was the cause of HF in one out of five patients and should be screened in the elderly with HF and myocardial thickening, regardless of sex and LVEF. Few transthyretin-gene-sequencing studies were performed in older patients. In many patients, it was not possible to determine the amyloid subtype
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