El Oncenio de Augusto B. Leguía y el desarrollo de la Armada Peruana

El gobierno que se instaló el 4 de julio de 1919, presidido por Augusto B. Leguía, significó un punto de quiebre en el desenvolvimiento de las instituciones estatales. En efecto, la política llevada a cabo por el régimen de la Patria Nueva, abarcó a todas las instancias de la burocracia estatal, incluyendo a la Armada peruana. La influencia que ejerció Leguía en las Fuerzas Armadas, especialmente en la Marina de Guerra, le permitió a esta última lograr una rápida y constante apertura a las nuevas tendencias, tecnologías, doctrinas y formas navales del mundo. De hecho, la recepción institucionalizada de las enseñanzas de los miembros de la Misión Naval estadounidense, las inquietudes de los marinos jóvenes, así como, la permisibilidad del Presidente de la República, tuvieron como consecuencia impregnar dentro de la Institución naval la modernizaciónen todos sus niveles, resultado que no pudo obtener su predecesora, la Misión Naval francesa. Esta impronta, auspiciada por el leguiismo, tendría una vigencia que abarcó todo el siglo XX y continúa hasta el presenteTesi

Luis Enrique Cam, El corresponsal del Huáscar. Crónicas de Julio Octavio Reyes. Lima, Mesa Redonda, 2015

Luis Enrique Cam, El corresponsal del Huáscar. Crónicas de Julio Octavio Reyes. Lima, Mesa Redonda, 2015

Tomás M. Pizarro Rojas, El resurgir de la Armada Peruana. Memorias del señor contralmirante don Tomás M. Pizarro Rojas (1884-1971). Lima, Instituto de Estudios Histórico-Marítimos del Perú, 2017, 382 p.

Obra editorial del Instituto de Estudios Histórico-Marítimos del Perú, con palabras liminares del doctor Héctor López Martínez, representa un nuevo aire en las publicaciones sobre temas navales peruanos. De hecho el valor de la publicación de las Memorias del contralmirante Tomás Pizarro radica tanto en el amplio rango temporal como en la minuciosidad y facilidad con las que su autor las escribe. El eje gira alrededor de su vida como oficial de la Marina de Guerra del Perú, en el lapso que bien puede denominarse como de resurgir y modernización de la Armada Peruana. Se inicia en 1896 y dura hasta su pase a la situación militar de retiro, en 1948. Curiosamente no se encuentran en sus Memorias los sucesos ocurridos aquel año con la rebelión aprista en el Callao, donde los buques y el personal de la Marina jugaron un papel primordial