The DEM or Mt. Etna: geomorphological and structural implications

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Regional tectonics of western Mexico and its implications for the northern boundary of the Jalisco block

El rift Tepic-Zacoalco en el occidente de México se ha considerado como el resultado de un fallamiento dextral y normal de edad Plio-Cuaternaria, producido a lo largo de la frontera norte del bloque de Jalisco debido a un proceso de riftogénesis que lo separa de la placa de Norteamérica. Estudios geológicos y estructurales de campo llevados a cabo en Nayarit y en Jalisco revelan que dicha frontera es más amplia de lo que se había considerado con anterioridad y que desde el Mioceno Tardío no ha habido deformación transcurrente a lo largo de ésta. La estructura en la frontera consiste de un sistema de semifosas y fosas tectónicas que se formaron en tiempos diferentes después de una fase transpresiva de edad Mioceno Medio. Parte de estas estructuras se formaron durante la separación de la Península de Baja California de la parte continental de México en el Mioceneo Tardío- Plioceno Temprano. La tectónica extensional del Plioceno Tardío y Cuaternario está concentrada en la parte sur de la frontera y, de acuerdo con datos microtectónicos, está caracterizada por un patrón del esfuerzo mínimo alineado NNE-SSW. Estos datos, combinados con la dirección de la extensión en el graben de Colima, indican un posible desplazamiento del bloque Jalisco hacia la trinchera. Nuestros resultados, en conjunto con estudios sísmicos y de movimientos de placas, hacen dudar de los modelos que hipotetizan un proceso de riftogénesis activo para el Plio-Cuaternario del bloque Jalisco. Sugerimos en cambio que la tectónica extensional a lo largo de las fronteras norte del bloque de Jalisco desde el Plioceno Tardío al Cuaternario podría ser un rasgo pasivo inducido por el movimiento diferencial de la placa Rivera con respecto a las placas adyacentes (placas de Cocos y Pacífico). doi: https://doi.org/10.22201/igeof.00167169p.1994.33.1.54

Volcanic and tectonic evolution of central Mexico: Oligocene to present

Con base en una síntesis de datos geocronológicos, estratigráficos y estructurales de. los terrenos volcánicos de México, reconstruímos las relaciones espacio-temporales entre la Sierra Madre Occidental (SMO) y la Faja Volcánica Trans-Mexicana (FVTM). Un análisis de 520 edades radiométricas integradas con los datos geológicos disponibles muestra que la migración del volcanismo dominantemente silícico del arco de la SMO con orientación NNW, al arco intermedio a máfico de FVTM con orientación E-W, ocurrió gradualmente en respuesta al progresivo desarrollo de la trinchera de Acapulco durante el Mioceno Temprano y Medio. Durante la mayor parte del Oligoceno, el arco de la SMO se desarrolló en un cinturón amplio con orientación NNW hasta la longitud de la ciudad de México al este y hasta la actual trinchera de Acapulco hacia el sur. Al final del Oligoceno y principios del Mioceno, el frente volcánico se situó a 230 km de la trinchera, aunque el resto del arco mantuvo la misma localización. Se piensa que este cambio refleja el desarrollo progresivo de la trinchera actual, en el sitio de la antigua frontera transforme entre la placa Norteamericana y el bloque Chortis. En el Mioceno Medio, los productos intermedios y máficos fueron emplazados a lo largo de un cinturón con orientación general E-W, extendiéndose también al este de la ciudad de México, mientras que en el Mioceno Tardío este volcanismo asumió un carácter uniformemente basáltico y una amplia distribución. La orientación general del arco no ha cambiado desde hace 16 Ma al presente, aunque se observa una migración del frente volcánico. hacia la trinchera. Basados en la orientación general del arco y en la composición dominante de los productos volcánicos, proponemos que la FVTM comenzó hace aproximadamente 16 Ma cuando empezó a formarse un arco volcánico intermedio a máfico con una orientación general E-W. La evolución tectónica de las partes occidental y central de la FVTM está caracterizada por una fase Mioceno Medio de fallamiento transcurrente seguida de una fase transtensional y extensional entre el Mioceno Tardío y el presente. La deformación se concentra en una zona con tendencia NW -SE en la parte occidental y en una zona amplia de 50-70 km orientada E-W en la parte central de la FVTM. La coincidencia entre el inicio de la FVTM y la fase de fallamiento transcurrente nos lleva a proponer que las fallas transcurrentes NW-SE y E-W podrían haber provisto vías preferenciales al magma cortical, permitiendo la formación de la FVTM con su orientación oblícua con respecto a la trinchera. doi: https://doi.org/10.22201/igeof.00167169p.1994.33.1.54

A widespread mafic volcanic unit at the base of the Mexican Volcanic Belt between Guadalajara and Querétaro

Grandes mesetas basálticas, emplazadas principalmente entre 10 y 6 Ma, forman la parte basal de las vulcanitas de la Faja Volcánica Mexicana (FVM), en el centro de México. En las áreas de Guadalajara y Querétaro, estas mesetas están separadas de las ignimbritas y andesitas de la Sierra Madre Occidental, de edad Oligoceno Tardío a Mioceno Temprano, por un período de calma volcánica marcado por varios depósitos erosionales, mientras que en las áreas alrededor de los lagos de Chapala y de Cuitzeo sobreyacen a secuencias andesíticas de edad Mioceno Medio a Mioceno Tardío. Las lavas de estas mesetas son relativamente primitivas (Mg#66-52), no sufrieron un fraccionamiento de baja presión significativo, y muestran claramente afinidades calci-alcalinas. Estas mesetas de basalto representan el primer evento volcánico en la historia de la FVM amplia y uniformemente distribuído. Los datos geológicos y geoquímicos sugieren que estos basaltos fueron emplazados duninte la primera fase tectónica extensional que acompañó a la FVM. doi: https://doi.org/10.22201/igeof.00167169p.1994.33.1.54