Detección de infección tuberculosa latente (ITBL) en personal de salud perteneciente al laboratorio clínico del Hospital Carlos Andrade Marín expuesto a mycobacterium tuberculosis mediante igras en el año 2016

En 1991, la Asamblea Mundial de la Salud, examinó la importancia de la Tuberculosis (TB) como un problema de salud pública. A partir del 2001, en el Ecuador se reconoció a la TB como problema de salud pública, por lo que se implementó la estrategia DOTS (del inglés, Directly Observed Treatment, Short-course), la cual es recomendada por la OMS y La Unión Europea en los servicios de salud. En el 2014 la tasa de prevalencia de TB fue de 78 personas por cada 100.000 habitantes y la incidencia fue de 54 personas por cada 100.000 habitantes. (OMS, 2016) El personal de salud es uno de los grupos más vulnerables a contraer una infección por tuberculosis, debido a la manipulación y exposición diaria con pacientes diagnosticados con TB y muestras biológicas contaminadas; dichas personas pueden desarrollar una infección latente sin presentar sintomatología, es por esta razón que la presente investigación pretende detectar TB en el personal de salud del laboratorio clínico, mediante la cuantificación de Interferón-γ en sangre periférica - IGRA´s (del inglés, Interferon-Υ realease assays). Materiales y métodos: Estudio descriptivo y observacional para establecer la frecuencia de trabajadores del laboratorio clínico del Hospital Carlos Andrade Marín (HCAM) de la ciudad de Quito, con infección de tuberculosis latente (ITBL) y la relación con variables sociodemográficas y de actividad laboral. Se realizó la prueba de QuantiFERON®-TB Gold en 50 muestras sanguíneas pertenecientes los analistas del área de microbiología, micología y al personal de limpieza de esta área. Resultados: De las 50 muestras analizadas el 32% (n=16) fueron positivos. De los pacientes positivos, el 44% (n= 7) corresponde al área de limpieza, el 37% (n= 6) al área de microbiología y el 19% (n= 3) al área de micología. Los individuos con más años de servicios (n= 7) entre 21-30 años presentan un 44% de positividad. La edad que presentó un mayor porcentaje de positividad fue de 46-55 años (n= 6) con el 38%. Conclusiones y recomendaciones: Existe una mayor frecuencia de contagio en el personal que labora en el área de limpieza, seguida del área de microbiología y finalmente la del laboratorio de micología. De acuerdo a los hallazgos, se sugiere revisar y controlar los procedimientos de bioseguridad implementados en el laboratorio, para así establecer las acciones preventivas y correctivas para minimizar el riesgo de contagio y la propagación en las otras áreas del laboratorio clínico, tanto en analistas, auxiliares de laboratorio y de limpieza como en personal administrativo