Architectura Fluminis : arquitectura del río Cardener y del canal del Aranyó en Cardona

Un río no es solamente agua, un río es, a menudo, un conector de masas verdes, un lugar de ocio y un espacio de conexión. Así era el Cardener a su paso por la Coromina antes de que un túnel lo desviase dejando más de tres kilómetros de río seco. Este proyecto busca estudiar el problema y hacer una propuesta de mejora. Para comenzar, se debe retroceder hasta el año 1997. Momento en el que el río empieza a abrirse paso hacia las galerías de la mina de sal que se encuentran por debajo. En este trayecto el agua dulce va disolviendo el material salino creando grandes vacíos subterráneos, para posteriormente, hacer colapsar el terreno y generar grandes dolinas en superficie. Debido a esto se construye un túnel de urgencia para desviar el río evitándole el paso por el meandro y salvando de esta manera la salinización del Cardener, y como consecuencia del Llobregat. Este proyecto empieza hacer un análisis de diferentes trabajos teóricos realizados en el territorio por parte de geólogos, ingenieros... La conclusión es que es muy difícil recuperar el lecho antiguo en la confluencia entre el río y el valle salino de Cardona. No obstante, se detecta la oportunidad de aprovechar un antiguo canal, el canal de l’Aranyo, para salvar esta zona deteriorada y recuperar de esta forma el río. La idea de mantener el túnel de desviación y el canal del Aranyó en paralelo ya se puso en práctica en el pasado. No obstante, se hace con visiones muy basadas en los campos de la economía y la ingeniería. Perdiendo así la oportunidad de generar ciudad con este canal. Por último, se percibe otro gran problema en el planteamiento actual, La inundabilidad. Este enemigo invisible permanece en el meandro de la Coromina a pesar de haber desaparecido el río. Esto es debido a que el túnel no absorbe los caudales para un periodo de retorno de cien y quinientos años. Las consecuencias ante una crecida del río de estas dimensiones pueden ser nefastas si este no está preparado para absorberla. En lo referente a la actuación, se hace un diseño del nuevo canal intentando responder a las necesidades y problemáticas del lugar. El principal parámetro a tener en cuenta en la propuesta es el agua. La sección se diseña en forma de “V” para intentar absorber el máximo de caudal. Se diseña un sistema de motas que permita aumentar aún más la cantidad de agua y frenar el paso de esta hacia el lecho antiguo. Se utilizan sistemas de bioingeniería mezclados con elementos prefabricados pesados para evitar que las crecidas dañen los distintos elementos. Se colocan pavimentos permeables para recoger las aguas de lluvia y que estas no permanezcan descontroladas. Y, por último, se crean sistemas de drenaje asumiendo la imperfección de la arquitectura y recoger tanto las aguas que pueda perder el canal como las de lluvia citadas anteriormente. En conclusión, la propuesta no inventa nada nuevo, simplemente reinterpreta actuaciones del pasado para tratar de mejorarlas y conseguir de esta forma una recuperación del territorio. La aportación de la intervención, que se detecta como la gran carencia en actuaciones anteriores, es la Arquitectura