Este artículo presenta un modelo que explica las diferentes etapas que ocurren en un proceso de fallo de un acero estructural durante la galvanización en caliente en discontinuo, desde la etapa de fluxado hasta la rotura total de la pieza o la parada de fisura. El modelo describe el proceso como un fallo por metal líquido, ayudado por el efecto fragilizante del hidrógeno, catalizador de las reacciones hierro-zinc. Se distingue entre dos casos, uno en el que el baño de galvanización tiene más de un 0,5 % de Sn, en el que se forma el compuesto intermetálico FeSn en el frente de fisura, y otro en el que el contenido de Sn en el baño de metal líquido es menor a ese 0,5 %, en el que se forman las fases Fe-Zn habituales. Se imponen dos condiciones mecánicas para que se produzca el fallo, que el factor de intensidad de tensiones sea creciente y a la vez superior al umbral, KIscc. Esas restricciones mecánicas sirven como criterio para dar algunas recomendaciones a galvanizadores para evitar el fallo, y también para reevaluar la bondad de recomendaciones de otras fuentes bibliográficas que han surgido en los últimos años, y de las que se hace un pequeño resumen