Las superficies ecuestres de arena y césped propuestas para la competencia o entrenamiento deben cumplir requisitos funcionales para asegurar calidad de la performance, bienestar animal y seguridad del jinete1. La FEI2 definió las características de las superficies ecuestres. Firmeza, amortiguación, rebote, agarre, uniformidad y consistencia. En las superficies donde se realizan competencias a nivel nacional e internacional como también en las superficies de entrenamiento es necesario monitorear los aspectos críticos de la respuesta de la superficie3. El objetivo del ensayo diseñar un método de evaluación que permita crear un protocolo de aplicación en certificación de competencias deportivas. El experimento consistió en relevar diversas superficies existentes en establecimientos ecuestres de distinto objetivo. Se realizaron mediciones mediante cuadrículas de 5x5 o de 10x10, de acuerdo al tamaño de la superficie. En cada estación se realizaron mediciones de espesor de amortiguación, test de Impacto, con un dispositivo similar al Clegg Hammer. La tracción longitudinal, se midió utilizando un dispositivo según norma ASTM F2333-04, además se utilizó el dispositivo denominado Going Stick. Se realizaron ensayos de caracterización gravimétrica de la arena y los materiales adicionados. El Contenido Volumétrico de Humedad4 se monitoreó con TDR. Los datos obtenidos se analizaron mediante ANVA y test de Tuckey. Las conclusiones preliminares indican que el método permite establecer con un grado de confianza las diferencias en uniformidad en distintos sectores de una superficie. Estas diferencias permiten diagnosticar el estado de la superficie y de este modo proceder con la práctica adecuada para su restauración. Repetir el método luego de las prácticas de restauración permiten monitorear la evolución de los parámetros medidos y se esperaría que signifiquen una mejora en las propiedades funcionales. Este método podría ser utilizado como protocolo de certificación de superficies ecuestres en competencias deportivas