Validation of fragility fractures in primary care electronic medical records: a population-based study

Abstract

Purpose: Electronic medical records databases use pre-specified lists of diagnostic codes to identify fractures. These codes, however, are not specific enough to disentangle traumatic from fragility-related fractures. We report on the proportion of fragility fractures identified in a random sample of coded fractures in SIDIAP. Methods: Patients ≥ 50 years old with any fracture recorded in 2012 (as per pre-specified ICD-10 codes) and alive at the time of recruitment were eligible for this retrospective observational study in 6 primary care centers contributing to the SIDIAP database (www.sidiap.org). Those with previous fracture/s, non-responders, and those with dementia or a serious psychiatric disease were excluded. Data on fracture type (traumatic vs fragility), skeletal site, and basic patient characteristics were collected. Results: Of 491/616 (79.7%) patients with a registered fracture in 2012 who were contacted, 331 (349 fractures) were included. The most common fractures were forearm (82), ribs (38), and humerus (32), and 225/349 (64.5%) were fragility fractures, with higher proportions for classic osteoporotic sites: hip, 91.7%; spine, 87.7%; and major fractures, 80.5%. This proportion was higher in women, the elderly, and patients with a previously coded diagnosis of osteoporosis. Conclusions: More than 4 in 5 major fractures recorded in SIDIAP are due to fragility (non-traumatic), with higher proportions for hip (92%) and vertebral (88%) fracture, and a lower proportion for fractures other than major ones. Our data support the validity of SIDIAP for the study of the epidemiology of osteoporotic fractures. Objetivos: La historia clínica informatizada utiliza una lista de códigos diagnósticos pre-especificados para identiticar fracturas, pero estos códigos no permiten distinguir entre fracturas traumáticas y fracturas por fragilidad. Se reporta la proporción de fracturas por fragilidad identificadas en una muestra aleatorizada de fracturas codificadas en SIDIAP. Métodos: Estudio observacional retrospectivo realizado en 6 centros de atención primaria que contribuyen a la base de datos SIDIAP (www.sidiap.org). Se seleccionaron pacientes ≥ 50 años con cualquier fractura registrada en 2012 (mediante códigos CIE-10) que permanecieran vivos en el reclutamiento y excluyendo aquellos con fractura previa, contacto imposible o aquellos con demencia o trastorno mental severo. Se recogió información sobre tipo de fractura (traumática o fragilidad), localización y características descriptivas de los pacientes. Resultados: Un total de 491/616 (79,7%) de los pacientes con fractura en 2012 fueron contactados y 331 (349 fracturas) fueron incluidos. Las fracturas más comunes fueron antebrazo (82), costillas (38) y húmero (32). 225/349 (64,5%) fueron fracturas por fragilidad, con mayor proporción para las localizaciones típicas de la osteoporosis: fémur (91,7%), columna vertebral (87,7%) y fracturas principales (80,5%). La proporción fue mayor en mujeres, edad avanzada y pacientes con diagnóstico previo de osteoporosis. Conclusiones: más de 4 de cada 5 fracturas principals registradas en SIDIAP son por fragilidad, con una mayor proporción para fémur (92%) y columna verterbal (88%) y menor proporción para otras localizaciones no típicas. Nuestros datos apoyan la validación de SIDIAP para el estudio epidemiológico de las fracturas osteoporóticas

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