El presente artículo considera las implicaciones proyectadas por los personajes principales de Historia universal de la infamia de Jorge Luis Borges. Los siete protagonistas encarnan un patrón común en su travesía infame: explotan las herramientas del poder empleando palabras –discursos–, según la propuesta de Michel Foucault, a pesar de que estén “al otro lado de la ley”. Aunque condicionados por circunstancias histórico-culturales específicas, los héroes-antihéroes comparten la ejecución del mal (para conseguir el goce del poder) y el ascenso al pedestal pseudo-mítico posterior a la cúspide de su infamia. Una de las ideas centrales del artículo es que la tensión entre el mal –abyección– y la ascensión a la categoría del mito –sublimación– origina la descarga de la infamia y configura su imagen universal