En la actualidad, casi todos los programas de educación superior públicos están dirigidos a incrementar el capital humano, lo que representa otra trasferencia de recursos del Estado o de la sociedad al sector privado, el cual está conformado por monopolios nacionales e internacionales y empresas trasnacionales a la luz del neoliberalismo. Se ha priorizado la formación de capital humano con la finalidad de incrementar la productividad de la economía, para así, después, poder incrementar el ingreso de la población, al menos de aquella que se forme en esos programas. Pero el incremento del ingreso de la población en la era neoliberal al amparo de la globalización depende más de razones políticas que de causas económicas. El incremento del ingreso de la población depende de razones políticas porque desde la profundización del neoliberalismo en la economía mexicana, y en todo el mundo, el ingreso se ha concentrado en muy pocas manos. La concentración del ingreso indica que la economía está trabajando en su punto óptimo, pero el punto óptimo es de monopolio, el cual, naturalmente, reduce los salarios, la producción y el nivel de empleo, a la vez que incrementa los precios con el consecuente aumento de las utilidades o ganancias, que son la causa de dicha concentración del ingreso
