Las calles, el lenguaje, los
medios de comunicación,
las redes sociales
son algunos de los articuladores
donde se plasman
y consolidan los discursos
de las ciudadanías de hoy.
Una de estas prácticas es la
de las mujeres reunidas en
el colectivo Ni Una Menos,
movimiento latinoamericano
contra la violencia hacia
las mujeres, cuyo accionar
constituye un ejemplo de
lo difícil que es la conquista
de los derechos ciudadanos.
En este breve texto
se expondrán dos razones
sobre las repercusiones y la
trascendencia de este movimiento
que –por lo que veremos–
debería vincularnos
a todos como sociedad