El sistema utilizado para la inspección postmortem en todos los mataderos de la Unión Europea está basado en la inspección visual de los órganos identificados como patológicos y su posterior destrucción como material especificado de riesgo. En numerosas ocasiones, el diagnóstico certero de la enfermedad queda simplificado a neumonías, parasitosis, enteritis, sin disponer de un diagnóstico microscópico que describa apropiadamente la lesión e intente aproximarse a un diagnóstico presuntivo de la enfermedad que padecen los animales sacrificados. El objetivo de este trabajo es realizar el estudio anatomopatológico de las lesiones más frecuentes encontradas en los rumiantes sacrificados en matadero y que por tanto son causa de decomiso. Para ello, se ha llevado a cabo un muestreo de los principales órganos afectados, haciendo hincapié en los aparatos respiratorio y digestivo para comprobar si el diagnóstico macroscópico realizado en los mataderos es eficiente, correcto y suficiente. Se ha observado que los órganos más frecuentemente decomisados son los pulmones y el hígado, tanto en bovino como en pequeños rumiantes. Las principales causas son el síndrome respiratorio bovino y las neumonías catarrales por micoplasmas en ganado bovino y ovino respectivamente. En el caso del hígado las principales razones de no aptitud en bovino son las parasitosis por fasciola y en los pequeños rumiantes las cisticercosis. Se ha concluido que el sistema de inspección oficial empleado en los mataderos españoles es eficaz y detecta los procesos patológicos que suponen un problema para la salud pública y que las leyes que rigen dichas actividades son correctas y suficientes