Actualmente el aumento en la esperanza de vida y del envejecimiento de la población conllevan a un incremento en la incidencia y prevalencia de los trastornos cognitivos. El DSM-IV-TR define el deterioro cognoscitivo relacionado con la edad, cuando el objeto de atención clínica es un deterioro de la actividad cognoscitiva, demostrado objetivamente, a consecuencia de la edad y que está dentro de los límites normales de la misma. Además de la edad existe otro factor de riesgo como es la jubilación, ya que supone una compleja transición psicosocial que conlleva cambios económicos, sociales y familiares, así como a la perdida de hábitos y roles de las personas mayores. Debido a esto se deberán tomar medidas para que las personas jubiladas puedan adoptar un nuevo papel, con otras expectativas de comportamiento y una modificación del curso cotidiano de la vida, en las que deberán estar presente nuevas ocupaciones o actividades que les permitan adaptarse a esta nueva etapa de su vida. Para esto se propone el diseño de un programa de activación, prevención y promoción de la salud para la población mayor, para ralentizar la aparición del deterioro cognitivo y mejorar la calidad de vida. La metodología utilizada para el desarrollo de este programa será por una parte el proceso de Terapia Ocupacional descrito en el Marco de Trabajo para la práctica de la Terapia Ocupacional, y por otra el Modelo de Ocupación Humana de Kielhofner. En el desarrollo se realizará una fase de screening que será imprescindible para la correcta selección de los participantes, así como para la formación de los grupos de trabajo con el mismo nivel cognitivo. Las actividades propuestas se han diseñado desde un enfoque bio-psico-social. Para concluir, con este programa se espera contribuir a la disminución en el gasto socio-sanitario y del sufrimiento humano no solo de los usuarios en riesgo de padecer demencias, sino también de sus familiares, mejorando así la calidad de vida de la población mayor