Actualmente nos encontramos en un nuevo paradigma orientado hacia una sociedad creativa, esto ha implicado que las personas buscan productos y servicios nuevos, creativos y personalizados, donde se tengan en cuenta sus necesidades y deseos. Este paradigma ha permeado todas las profesiones, incluyendo el derecho, que se ha visto en la necesidad de buscar nuevas herramientas para reinventarse y adaptarse a las nuevas exigencias del mercado. Una de estas herramientas es el Legal Design, la cual no solo permite mejorar la apariencia de los documentos legales para hacerlos más comprensibles, sino que también permite evaluar y crear servicios legales enfocándose en el uso, utilidad y atractivo que tienen dichos servicios para el consumidor final