Fil: Dovara de Varoli, Isolina. 
    Universidad Nacional de Cuyo. Facultad de Filosofía y Letra

Dovara de Varoli, Isolina

Spanish

Repositorio OAI Biblioteca Digital Universidad Nacional de Cuyo

252 RESEÑAS R .L .M . 22 ( IflB fi]concretas-, para convertirse en piezas completas en sí mismas y sugeridoras de futuras exploraciones.Ocioso seria ponderar el rigor de estos trabajos; más aún, su claridad que prolonga la mejor tradición del discurso crítico hispánico en una etapa de formulaciones abstrusas que traslucen la confusión teórica y el desorden metodológico» En suma, nuevamente hemos oído la voz de un gran maestro.Emitió de ZuietoUMBERTO ECO: I l pendolo di Foucault. Milano, Bompiani, 1989. 509p. 24 x 15 cm.Solemne fue la presentación de El péndulo de Foucoult, la última novela de Umberto Eco, en la Feria del Libro de Francfort, en octubre de 1988, justamente dedicada a la producción editorial italiana. Después del enorme éxito mundial de El nombre de lo roso, con esta novela muy discu­tida Umberto Eco vuelve a ocupar el primer lugar como autor del libro más vendido semanalmente en las librerías italianas.El péndulo de Foucoult es un grueso volumen de 509 páginas más los índices, dividido en diez partes (que corresponden a los zefirot de la Torah hebraica) y en ciento veinte capítulos. Páginas muy densas en las cuales el autor, bajo la apariencia de una novela de *su s p e n s e presenta con mucha generosidad cualquier problema posible, incluso los de actualidad. Nos encontramos frente a un monumento de sabiduría cultural y literaria, pero con altos y bajos: alta cultura y crónica barata al mismo tiempo; lenguaje elevado y expresiones descuidadas, todo mezclado y ofrecido en abundancia, a tal punto que el lector un poco se divierte, otro poco se irrita y se aturde; se apasiona, por momentos interrumpe la lectura con ganas de dejar pero después, como deber social, termina el libro y con cierta satisfacción.RESEÑAS 253Fue en ese momento que vi ef Péndulo. Lo esfera, móvil en el extremo de uno cuerdo largo f i joda en lo bóveda de¡ coro, describía sus amplias oscilaciones con isócrono imponencia. Así empieza el libro. Esta esfera de 28 kilos, suspendida de un hilo de 68 metros, sirvió al físico francés Jean Bernard León Foucault (1819-1868) para demostrar la rotación de la tierra. La esfera marcaba, con un punzón, su paso sobre una alfombra de arena tendida en el suelo. Con el trascurso de las horas, por el movimiento de la tierra, el punzón trazaba nuevas 1roggiere1 sobre la arena mientras el péndulo seguía oscilando de manera isócrona. El experi­mento fue realizado la primera vez en París, en 1851, en un sótano; después en el Conservatoire des Arts y Metiers, de París y, finalmente, bajo el Panteón. Desde 1855 está en medidas reducidas en el citado Conservatoire.Es allí donde en la noche del 23 de junio de 1984 empieza y concluye la complicadísima trama circular de la novela. Mientras El nombre de la rosa se desarrolla en siete días, en un espacio bien definido y en un año preciso, es difícil definir las unidades de tiempo, lugar y acción de El péndulo de Foucault. En lo que se refiere al hilo conduc­tor del argumento, el relato avanza desde el inicio de los años setenta hasta 1984, entre una editorial de Milán y el museo de París en el cual está expuesto el péndulo, con un paréntesis sin importancia situado en Brasil. Pero también se desarrolla entre 1943 y 1945 en un pueblo de Piamonte; desde el siglo II después de Cristo hasta hoy a través de las vicisitudes del saber hermético; desde 1300 hasta el 2000 siguiendo el recorrido de los Templarios y los Rosa- cruces por la conquista del mundo.Los personajes principales son tres: Diotallevr, el más viejo; Iacopo Belbo y Casaubon, el narrador en primera persona. Los tres, redactores de la editorial Garamond, se contactan, por motivos profesionales, con autores que se ocupan de ciencias ocultas, sociedades secretas, com­plots cómicos. Los redactores inventan, por jugar, un plan, un complot por medio del cual se podría conquistar el dominio del Universo y penetrar el secreto de Dios y de la Naturaleza. Por exceso de diligencia, de celo, los tres poco a poco se olvidan de todo, pasiones, esposas, novias,254 RESEÑAS R .L .M . 22 (1Q 89)hijos. Para ellos solo interesa el plan; un juego muy inteli­gente ya que hay quien cree en la fantástica construcción de los tres intelectuales. Pero empiezan las desgracias y los tres terminan víctimas de su mismo juego. Dos mueren? uno de ellos, Belbo, colgado del péndulo de Foucault en un museo de París teatro de cruentas escenas como en un Grand Guignol. Casaubon, único espectador, escondido primero en un periscopio, después en un pequeño modelo preparatorio de la Estatua de la Libertad, asiste horrorizado a esa orgía oscura.Cuarto protagonista son los Templarios, los Caballeros del Templo de Jerusalén conquistado por los Cruzados en 1118: en pocos decenios adquirieron importancia en el mundo de la época y por este motivo Felipe el Hermoso, en 1307, suprimió la Orden. Pero, según la leyenda, los Templarios lograron sobrevivir clandestinamente a lo largo de los siglos y -a distancia de ciento veinte años entre uno y otro- vuelven a encontrarse. La última cita, en 1944, en un lugar secreto de la superficie del planeta desde el cual se proponen dominar y determinar el clima de todo el mundo.Para que los tres redactores protagonistas puedan encontrar el código del Plan, Eco -con ritmo barroco- intro­duce la historia del mundo a través de una serie de ritos enigmáticos, disputas teológicas, controversias esotéricas; una construcción laberíntica, enciclopédica, grotesca, un homenaje explícito al 'feulf letón1 de Sue. En este complot están comprometidos casi todos los personajes de la historia medieval y moderna: San Bernardo, Felipe el Hermoso, Los Masones, los Rosacruces, el Conde de San Germán, Descartes, los Jesuitas, Napoleón, De Maistre, Hitler... y movimientos como el racionalismo, el Misticismo, la Resistencia, el 68, la P. 2.Con mucha inteligencia, para evitar que nos perdamos en este laberinto cuya completa topografía está hecha de innumerables trayectos además de los caminos principales, Eco logra que el lector vuelva cada tanto al motivo principal de la trama y, al mismo tiempo, trata de no cansar a quien podría aburrirse, con un clima de 'suspense1 que siempre preanuncia algo novedoso; se crea así el síndrome de lo sospecho:RESEÑAS 255"Hay una enfermedad que se apodera de la cultura y de la política de nuestra época. Por este motivo he escrito el Péndulo... para denunciarla. Es una enfermedad de la inter­pretación que ha influido, sobre todo, en la teología, en la política, en la vida psicoló­gica. Su nombre es el Síndrome de la sospechaAsí, empujado por la sospecha, Eco logra conectar con hilos muy sutiles las mil y una presencias de distintas ideo­logías, a través de conexiones, ya que para él cualquier dato se hace importante si se relaciona con otro. La conexión cambia la perspectiva. Hoce pensar que coda apariencia del mundo, cada voz, cada palabra escrita o dicha no tiene el sentido más evidente, sino que nos hablo de un secreto. El criterio  es simple: "sospechar, sospechar, sospechar1.Libro terriblemente críptico, difícil para el lector a partir de las primeras páginas. Alguien dijo que el lector merece un premio. Eco, en efecto, tiene predilección por largos registros de personas y cosas, digresiones (a veces muy breves como aforismos; a veces largas, casi cuentos en un cuento); descripciones, citas de distinta procedencia, grabaciones de la computadora, reproducciones de docu­mentos verdaderos y falsos, ilustraciones. Todo un material que revela el gusto por la cultura y por la erudición, preferen­temente medieval; un collage de citas, préstamos, plagios, una convivencia entre cabala y computación, entre magia y ciencia.El estilo también se caracteriza por virtuosismos; variaciones lexicales barrocas, abstrusas, que afirman y niegan al mismo tiempo; una terminología oscura para el lector común. Sin embargo hay que destacar la intensidad eficaz de los diálogos, la agilidad en el desarrollo de los distintos hilos novelescos.Desde la aparición del libro, la crítica está dividida en pro y en contra. Así, junto a juicios como novelo de gron movilidad escenográfico, maquino prodigioso de diabó­lico habilidad; cuento divogotorio, laberíntico, enciclopédicOj encontramos otros durísimos, Flagelo fabulotorio que defor­ma, disocia, ofende ( Osservotore romano); Bufonería, super-256 RESEÑAS R . L .M .  22 ( 1989 )fide lidad, deformador) (Pietro C ita ti). Para Eco es un dogma no responder a los reparos de los críticos ni a las observaciones de muchos lectores que han señalado errores y omisiones, inevitables a lo largo de las 500 páginas del libro. En conclusión: obra difícil, de reflexión existencial, en la cual la trama sutil de la novela funciona como el motor que anima la enorme masa de erudición. De esta manera, escribe Alberto Moravia, Eco quiso instruir di vir­tiendo y d ivertir instruyendo.Isolino Dovoro de Varo/iRICCARDO CAMPA. La scrittu ro  e lo memoria. Istituto della Enciclopedia-Direzione generale delle Informazioni dell'Editoria e della proprietà letteraria artistica e scienti­fica. Presidenza del Consiglio dei Ministri, s/f 192 p., 17 x 24 cm.Con este título se inaugura la Colección de Historia y Cultura que publican en forma conjunta dos prestigiosas editoriales italianas: el Instituto de la Enciclopedia y la Presidencia del Consejo de Ministros a través de su Dirección General de Informaciones Editoriales y de la Propiedad literaria, artística y científica.El tomo comprende cuatro ensayos sobre cultura contemporánea presentados en ocasión de la 13° Feria Internacional del Libro en su edición dedicada a "El Universo de Jorge Luis Borges". La misma fue programada por la Embajada de Italia en Argentina y el Instituto Italiano de Cultura con sede en Buenos Aires, y se desarrolló en esta ciudad entre el 27 de marzo y el 13 de abril de 1987.El profesor italiano Riccardo Campa, autor de los ensayos, es un brillante y reconocido intelectual, catedrático de historia del pensamiento político en las universidades de Nápoles y Bolonia. Se desempeña desde 1987 como Di-

Umberto Eco: Il pendolo di Foucault. Milano, Bompiani, 1989. 509p. 24 x 15 cm.

https://bdigital.uncu.edu.ar/objetos_digitales/15055/18-doura-de-varoli.pdf

Umberto Eco: Il pendolo di Foucault. Milano, Bompiani, 1989. 509p. 24 x 15 cm.

Abstract

Similar works

Full text

Available Versions

Repositorio OAI Biblioteca Digital Universidad Nacional de Cuyo