Resumen:
En los últimos años, el inusitado auge de la producción piñera costarricense ha estado rodeado
de controversia. El carácter intensivo y extensivo del cultivo ha implicado una alta
conflictividad socio-ambiental. Desde hace más de una década, organizaciones locales y
ambientalistas han denunciado impactos nocivos sobre el ambiente, la salud pública y las
formas de vida de las poblaciones cercanas a las plantaciones. Asimismo, los sectores
opositores al monocultivo, cuestionan la incapacidad estatal de atender las diversas denuncias
ciudadanas vinculadas a la profundización de esta actividad extractiva.
En este marco, proponemos abordar el conflicto socio-ambiental por la expansión piñera en
Costa Rica, desde el enfoque de la productividad del conflicto (Azuela y Musetta, 2008;
Merlisnky, 2013). Dicha perspectiva teórico-metodológica habilita la observación de los
procesos originados a partir de los conflictos con secuelas en el orden social. Implica estudiar
lo que podrían considerarse cierres provisionales del conflicto y analizar en esta instancia, la
dinámica entre los actores movilizados y la institucionalidad pública.
Nos aproximamos al saldo institucional del conflicto piñero, a partir de la descripción y análisis
de dos iniciativas implementadas para la atención de las consecuencias socio-ambientales del
monocultivo. Por un lado, estudiamos la Plataforma Nacional para la Producción y Consumo
Responsable de Piña, creada desde la Vicepresidencia de la República y los Ministerios de
Ambiente y Agricultura y promovida por el PNUD. Y por otro, indagamos las moratorias
cantonales a la expansión piñera establecidas por gobiernos locales e impulsadas por
organizaciones comunales y ambientalistas.UCR::Vicerrectoría de Docencia::Ciencias Sociales::Facultad de Ciencias Sociales::Escuela de Trabajo Socia