62 p.El presente capítulo aborda el papel de la diplomacia cultural profunda en la política exterior, por medio de una aproximación a experiencias de estos cuatro Estados, que atestiguan cómo las estrategias de diplomacia cultural han sido edificadas a partir de la visión de imagen internacional que han construido internamente para alcanzar el rol internacional que esperan desempeñar. Estos Estados presentan diversas experiencias y cosmovisiones; por ello, al analizarlas transversalmente, es posible observar el carácter adaptable y disponible del soft power, que no depende de las características tangibles de los Estados. Esto último quiere decir que la diplomacia cultural no requiere formas de Estado específicas, se ajusta desde y para la diversidad que le es propia, la convierte en fuente de poder para la política exterior, mientras la integra.Anotaciones sobre el contexto internacional vigente
Estados potencia cultural: poder del poder suave
Dimensiones de diplomacia cultural profunda: tejiendo puentes
Promoción cultural exterior
Enseñanza del idioma e historia nacionales
Intercambios educativos y académicos de avanzada
Redes de expertos y amigos del Estado
Lazos culturales expansivos: connacionales en el exterior y migrantes extranjeros
Diálogos intercultural e interreligioso
Protección, conservación y promoción del patrimonio cultural
Construcción de opinión pública en relaciones internacionales
Experiencias sui generis, manifestaciones de particularida