El presente proyecto busca desarrollar un espacio urbano que recree condiciones y
horizontes de identificación entre la población ayacuchana y su pasado. Un espacio
que albergue y difunda la riqueza musical de la región, pero que sobre todo se
convierta en un símbolo de su cultura. La casa de la música ayacuchana surge no
solo como una necesidad frente a la insuficiente cantidad de espacios para el estudio
y difusión musical. Sino también como un artefacto que acciona la memoria colectiva
y que sirve como un dispositivo, que al igual que la música, evoque y se conecte con
el pasado. El objetivo del proyecto va más allá de ser un edificio con usos académicos,
su intención es ser más bien un espacio de expresión y encuentro comunitario que
sirve como un nodo para la vida cultural de Ayacucho.
Partiendo de la premisa de crear un nuevo espacio urbano el proyecto toma en
consideración los lineamientos urbanos de Ayacucho, además responde a las
necesidades y condiciones sociales de dicho contexto. La línea de investigación del
proyecto abarca un estudio en tres escalas. La primera, la escala macro, involucra el
mapeo de densidad poblacional, uso de suelos y zonificación de la ciudad de
Ayacucho. La segunda escala, la escala meso, sirve como primer acercamiento al
distrito de Ayacucho en el que los mapeos de usos de suelos adquieren más énfasis
y detalle, así como los mapeos de vías, flujos peatonales y actividades culturales.
Finalmente, en la escala micro se hace un acercamiento al contexto inmediato de la
zona de intervención, para esta escala se toma en consideración la realidad física
inmóvil y la realidad subjetiva / sensorial