El franquismo fue un régimen parafascista inserto en la Europa de entreguerras. No alcanzó grados de consenso y adhesión comparables al nazismo alemán o al fascismo italiano, pero lo cierto es que, a pesar de las amenazas que hicieron peligrar su estabilidad durante los años cuarenta, permaneció incólume y estable. El franquismo logró un cierto consenso entre sus apoyos sociales, mientras que excluía a los vencidos de su proyecto político. Tres fueron las claves para que fuese así: una ‘cultura de la victoria’ que legitimaba la situación, la represión sobre los vencidos y la gestión de la miseria.The Franco regime displayed many of aspects of the fascism that marked interwar Europe. Although Francoism did not achieve the same degree of consensus and support enjoyed by its Nazis and Fascist counterparts, it did command enthusiasm among its grassroots supporters. Accordingly, it proved able to withstand a number of serious challenges in the 1940s, while continuing to push those from the defeated side in the Spanish Civil War of 1936-139 to the margins of social and political life. Three key factors explain this success: a victory culture that bestowed legitimacy on the regime; the repression of the defeated and the accompanying exploitation of shortages and hunger in everyday life