Futuros imaginarios… Historias imaginadas

Abstract

Son pocos los argumentos que sostienen que la historia del media art no se encuentra limitada a la utilización de medios específicos tales como la electricidad, el desarrollo del telégrafo, la grabación de sonidos, el surgimiento del cine y sus antecedentes, el lanzamiento de la radio y la televisión, la aparición del video, las repercusiones del uso de la computadora o el crecimiento de las redes de información. Pensar esta historia como una mera arqueología de los aparatos vinculados a nociones progresivas de sofisticación técnica evita el curioso equilibrio puntuado –y la complejidad social- que forma gran parte de la evolución de los sistemas de comunicación que escapan de las teleologías limitadas (y telefobias) de la modernidad y encuentran funciones expresivas inimaginadas por los ingenieros de la integración de sistemas. Pensar en una historia del media art sin buscar sus raíces, como diría Friedrich Kittler, en las redes discursivas de períodos precedentes sería confundir el presente como un resultado lógico, implicaría pasar por alto las rupturas y constituiría una subestimación del desorden. Sin embargo, la historia errante del media art, que todavía aguarda un tratamiento más exhaustivo, no puede evitar cierta estimación de su legítimo –si no errático– linaje.Facultad de Bellas Arte

    Similar works