El siguiente ensayo propone convertirse en una primera aproximación al papel fundamental que la enseñanza de la lógica formal implica en la educación superior de hoy. Parte de la idea (premisa) que en las instituciones universitarias se han realizado en el último tiempo muchos debates acerca de la enseñanza de las ciencias fácticas (en sus categorías de naturales y sociales) pero se ha descuidado la enseñanza de la ciencia formal (más de la lógica que de la matemática); de allí, que la evaluación de este aspecto nos lleva a concluir que en la educación superior los actores del proceso educativo (estudiantes y profesores) estamos
muy distantes de alcanzar un verdadero proceso universitario
de calidad que posibilite la consolidación de una comunidad académica crítica, pues es la lógica uno de los elementos centrales e imprescindibles de tal resultado y, al estar ausente, no sólo de las aulas, sino de la mayoría de procesos académicos, es imposible esperar resultados distintos a los que tenemos hoy: una educación vacía de excelencia