La técnica de las redes semánticas, se suele clasificar como una técnica de carácter mixto (Alvarez-Gayou, 2003), puesto que puede analizarse desde un punto de vista cuantitativo, cualitativo o complementando ambas miradas. En este caso, se revisará una forma de aplicación de la técnica aludida, en la investigación cualitativa, a partir de la propuesta metodológica de Isabel Reyes Lagunes (1993). A manera de ejemplo, se describirá un caso que manejó la Red de Cuerpos Académicos "Niñez y juventud en contextos de diversidad", durante la etapa diagnóstica del proyecto "La interculturalidad en espacios universitarios multiculturales". Dicha Red, integrada por tres Cuerpos Académicos de tres Estados de la República Mexicana ("Educación, cultura y procesos de aprendizaje", de Morelia, Michoacán; "Estudios interculturales", de Xalapa, Veracruz y "Desarrollo de habilidades Discursivas y Cognitivas", de la ciudad de Puebla), pretendió, a través de dicho proyecto inicial: "Identificar las ideas que sobre diversidad tienen los estudiantes de la licenciatura en psicología de la UMSNH". Por tanto, se pensó en contar con un diagnóstico de tres instituciones (una de cada ámbito universitario al que pertenecían los integrantes de cada cuerpo académico de la Red). Para elaborar el diagnóstico, se eligió la aplicación de dos técnicas: redes semánticas naturales y grupos focales. En este texto se enfatiza el empleo de la primera de éstas, para lo cual se plantea el fundamento teórico, sedescribe la técnica y posteriormente se relata la aplicación en el contexto de Morelia, Michoacán. Las redes semánticas, pueden definirse como el conjunto de palabras recuperadas a través de la memoria mediante un proceso reconstructivo que no sólo se obtiene por vínculos asociativos, sino también por la naturaleza de los procesos de memoria (Figueroa, González y Solís, 1981); por tanto, se trata de las ideas y conceptos que las personas construyen acerca de cualquier objeto, tema o situación de su cotidianidad y son expresados también en términos coloquiales. Su importancia radica en que a través del lenguaje es posible conocer y comprender muchos de los procesos mentales, puesto que existe una íntima relación del lenguaje, tanto con el pensamiento como con la percepción y el aprendizaje (Chomsky, 1977). Así, las estructuras cognitivas tales como creencias, opiniones, expectativas, hipótesis, teorías y esquemas, que suelen emplearse en la vida cotidiana para interpretar estímulos de manera selectiva, no se quedan en el plano cognitivo, ya que dicha interpretación permea las acciones. Por ende, tales estructuras cognitivas expresadas a través del lenguaje verbal, dan sentido al mundo de los estímulos, que no se rige por meros aprendizajes o instintos (Morales, Moya, Gaviria, y Cuadrado, 2007). De este modo, la técnica de las redes semánticas, constituye un recurso empírico de acceso a la organización cognitiva de los significados, a través de los significantes empleados, considerando que el universo cognitivo que de ahí resulta, es fruto también de aprendizajes sociales. Figueroa y colaboradores (1981) hacen notar que la estructura semántica no permanece inmutable, sino que se va desarrollando y por ende, se van adquiriendo más relaciones al aumentar los conocimientos generales del individuo; además, se modifica también de acuerdo con la influencia de la cultura de su entorno y de su propia experiencia de vida. Reyes-Lagunes (1993), plantea un procedimiento que consta de varios pasos: 1) diseñar las palabras o expresiones-estímulo, 2) aplicarlas, de acuerdo con la normatividad, 3) sistematizar la información con base en las indicaciones, 4) se define el núcleo de la red y se grafica, 5) se realiza el análisis cualitativo o cuantitativa (según sea el caso). Este texto concluye planteando las ventajas y desventajas de esta técnica sobre todo desde su empleo en la investigación cualitativ