En este artículo se analizan, desde una perspectiva ecológica, los principales resultados obtenidos en las investigaciones sobre violencia entre adolescentes: incidencia, características de agresores y víctimas, diferencias en función de la edad y el género, prestando una especial atención a la serie de estudios que su autora ha dirigido con 826 adolescentes sobre las condiciones de riesgo y protección de la violencia que sufren, ejercen u observan, en la escuela y en el ocio. A partir de los cuales se propone desarrollar la prevención integrando características de los programas específicos contra el acoso desde una perspectiva más amplia, que permita superar las contradicciones más habituales y rechazar todo tipo de violencia así como el modelo de dominio-sumisión en el que se basa. Y se destacan, como componentes clave para la prevención: el desarrollo de la cooperación a múltiples niveles y el currículum de la no-violencia. Los resultados obtenidos en un programa evaluado con 783 adolescentes confirman la eficacia y viabilidad de dichos componentes