Esta propuesta parte de las particularidades de la formación en Lengua A para Traductores, un ámbito poco definido y normalmente muy alejado de los contenidos literarios. Se plantean dos conjuntos de actividades, ligados a la evaluación y a la reescritura, de cuya vinculación surgen los conceptos de lectura intencional y desautomatización de la escritura, y que parecen por tanto especialmente adecuadas para fomentar una creatividad en el uso de la lengua que resulta de la mayor importancia para la traducción literaria. A partir de unas primeras experimentaciones con reescritura de textos literarios, se puede concluir que las nociones de tono y estilo están intuitivamente disponibles para los escritores noveles y son por tanto excelentes candidatas para ser operativas en la formación en traducción literari