Debido al mal pronóstico de los tumores del área periampular y especialmente de adenocarcinoma de páncreas (ADCP), resulta fundamental la búsqueda de biomarcadores para su detección precoz y de moléculas que permitan el desarrollo urgente de nuevas estrategias terapéuticas. Para ello, los modelos animales han demostrado ser muy útiles en la evolución de los avances en el cáncer de páncreas. Han contribuido al estudio de nuevos quimioterápicos que posteriormente han sido trasladados a ensayos clínicos con humanos que han demostrado un aumento en la supervivencia.
El desarrollo de los quimioterápicos y otras moléculas antitumorales se encuentra íntimamente relacionado con los modelos experimentales. Durante los últimos 50 años, los xenoinjertos subcutáneos derivados de líneas celulares cultivadas in vitro han sido ampliamente utilizados. Multitud de quimioterápicos han sido testados utilizando estos modelos. Sin embargo, fármacos que funcionan bien en el ratón no son necesariamente efectivos en el ser humano. Desde los años 70, se han utilizado muestras de cánceres humanos tomados mediante biopsia o mediante cirugía que posteriormente han sido implantados directamente en ratones. Estos xenoinjertos, también conocidos como “tumorgraft” mantienen la morfología tumoral inicial, así como las mutaciones genéticas que le acompañan. Sin embargo, estos modelos fueron inicialmente desechados debido a su alto índice de rechazos. Recientemente, se ha retomado esta línea de investigación gracias al desarrollo de nuevas cepas de ratones inmunodeprimidos modificadas genéticamente que han minimizado las tasas rechazo.
De esta manera, ha sido posible que este modelo sea competitivo a la hora de analizar la eficacia de las distintas drogas para el estudio de ADCP.
Siguiendo esta línea de trabajo hemos desarrollados tres modelos experimentales mediante el uso de xenoinjertos: subcutáneo, intraabdominal y pancreático. El objetivo principal de este estudio es valorar la viabilidad de los xenoinjertos ortotópicos (intrapancreático) y heterotópicos (intraabdominal y subcutáneo) de cánceres de páncreas humanos implantados en ratones desnudos