Refiere que la Educación Sexual Integral es un deber de la escuela y un derecho al que todos los y las estudiantes deben tener acceso. Los estudiantes tienen derecho a una Educación Sexual Integral pertinente, científica y ética, con enfoque de derechos humanos y género, según los estándares internacionales, que contribuya a su formación integral y a su plena realización como personas