El Consejo Nacional de Discapacidades, CONADIS, y el Instituto Nacional del Niño y la Familia, INNFA del Ecuador realizaron una investigación donde se concluyó que el 13.2% de la población ecuatoriana tiene algún tipo de discapacidad, es decir una limitación de carácter permanente para realizar una actividad como la realizan las otras personas y aproximadamente el 10.1% de personas son usuarios de sillas de ruedas o de ayudas técnicas.
Por este motivo en nuestro país se han estado realizando investigaciones y desarrollando nuevos dispositivos con capacidades motoras mejoradas para poder reintegrar a las personas a su vida laboral, pero ninguna que permita a su usuario subir y bajar escaleras; esta fue la razón por la cual se decidió realizar el diseño de una silla de ruedas autónoma que permita subir y bajar escalones a su usuario.
Para comenzar con el diseño se investigó sobre los diferentes tipos de sillas de ruedas que existen en el mercado y los mecanismos que estos poseen, con lo que se pudo seleccionar las mejores cualidades y atributos de cada una.
Simultáneamente se investigó la norma ecuatoriana de arquitectura y la norma internacional de construcción de sillas de ruedas, para tener un panorama general sobre las dimensiones que debía tener nuestro prototipo.
Con las cualidades y atributos seleccionados y las dimensiones fijadas por norma, se procedió a analizar los diferentes elementos que serían utilizados en nuestro prototipo de silla de ruedas, para su posterior diseño y cálculo.
Con todos los elementos diseñados y calculados se procedió a realizar la simulación de la silla de ruedas con la que se comprobó que el mecanismo utilizado era totalmente viable.
Con la información obtenida se concluyó que nuestro prototipo era estable y seguro para su usuario, además le permite tener una autonomía total al momento de la conducción