Aunque no sea ajeno al nuevo y generalizado fenómeno del maltrato
infantil tanto en la familia como en la escuela y por parte
de la sociedad adulta, el maltrato sexual del niño en todas sus
variedades (incestos, violaciones, acosos y abusos sexuales,
pedofilia, explotación sexual del niño y prostitución infantil…) constituyen
una fenomenología relativamente inédita al menos en sus proporciones,
y por ello muy característica del nuevo modelo de sociedad, y que
por ello ha de ser explicado no solo a partir de las actuales condiciones
de la infancia en dicha sociedad, sino también por otros dos órdenes de
razones: las recientes transformaciones de la misma sexualidad junto con
los factores y procesos que mejor definen o caracterizan la sociedad de
mercado, y la sociedad- en-redes con sus específicos valores y violencias