Insofar extension of working lives is in the agenda of the EU institutions and of most European countries, concrete measures need to be taken so that older workers are given the opportunity to continue working and to do it in conditions corresponding to their health and physical shape. Consequently, these measures comprise working conditions -especially working time arrangements-, health and safety measures, training, anti-discrimination measures, as well as raising consciousness of the older workers' contribution to companies. In promoting changes in regulations or participating in discussions on the adequacy of proposed policies the social partners should have a major role. In Spain the Government outlined in 2011 -at the initiative of the social partners- a global strategy (Strategy 55+) to tackle with older workers' low employment rates. This document included quite innovative proposals -such as shorter working hours with a compensatory benefit-, but they have not been implemented. The social partners, who should have actively participated in the Strategy's development, have not sufficiently claimed for its application.En la medida en que la extensión de la vida laboral se ha instalado en la agenda de las instituciones de la UE y de la mayoría de los países europeos, resulta ineludible tomar medidas concretas para que los trabajadores de más edad tengan la oportunidad de seguir trabajando y hacerlo en condiciones adecuadas a su estado de salud y capacidad física. En consecuencia, estas medidas comprenden las condiciones de trabajo -especialmente en materia de tiempo de trabajo-, las medidas de seguridad y salud, la formación, las medidas contra la discriminación por razón de edad, así como la concienciación de los empresarios respecto a la contribución que los trabajadores de edad avanzada aportan a las empresas. En este sentido, debe plantearse la importancia de la participación de los interlocutores sociales en la promoción de cambios normativos y en promover el debate sobre la idoneidad y la suficiencia de las políticas propuestas por los poderes públicos. En España, el Gobierno aprobó en 2011 -a iniciativa de los interlocutores sociales- una estrategia global (Estrategia 55 +) para hacer frente a las bajas tasas de empleo de los trabajadores de más edad. Este documento incluye propuestas muy innovadoras -como la reducción de jornada acompañada de una prestación de Seguridad Social- que, sin embargo, no se han implementado. Por otro lado, los interlocutores sociales, que deberían haber participado activamente en el desarrollo de la Estrategia, no reivindicado de forma suficientemente contundente su aplicación
