El uso de las tecnologías de la información y la comunicación en diferentes aspectos de la vida cotidiana se ha hecho cada vez más común, desde las transacciones financieras a través de Internet así como el auge de los dispositivos móviles y sus diferentes aplicaciones. En el caso de este último, la movilidad y la posibilidad de acceder a la información sin necesidad de estar en un lugar fijo han contribuido a su gran aceptación. La posibilidad de integrar movilidad e Internet brinda la oportunidad de que las organizaciones ofrezcan nuevos beneficios extendiendo sus servicios e información a empleados y clientes, lo que ayuda a aumentar la productividad y beneficio. Los dispositivos móviles y las redes inalámbricas permiten que los usuarios puedan desde una red de área local o desde Internet compartir información que en algunos casos es útil, no solo a nivel personal sino también a nivel empresarial y comercial. Esto ha permitido que el manejo de estas tecnologías sea utilizado con el fin de mejorar la competitividad, tanto en oficinas y empresas de toda índole incluyendo centros hospitalarios