Universidad Autónoma de Madrid. Instituto Universitario La Corte en Europa (IULCE)
Abstract
Tras la renovación de la Tregua de los Doce Años, en Bruselas se
manifestaron diversas sensibilidades políticas sobre la misma. Entre ellas, fueron
particularmente importantes algunas relacionadas con las formas de espiritualidad
que se encontraban en vigor en el espacio áulico madrileño. Es lo que sucedió con
los confesores de los archiduques Alberto e Isabel, los cuales presentaron puntos
de vista diferentes, pese a que la historiografía tradicional los ha visto como un
binomio que actuó siempre de mutuo acuerdo. El confesor dominico de Alberto,
Íñigo de Brizuela, expresó una opinión prudente que salvaguardara los intereses
hispanos en los Países Bajos. Mientras, Andrés de Soto, confesor recoleto de Isabel
y próximo a Gracián de la Madre de Dios, luchó por el triunfo del catolicismo por
encima de los intereses de la Monarquía Hispana. El presente artículo, expone las
actitudes políticas de los dos confesores, sus diferencias y las razones que pueden
explicarlasIn Brussels, different political views were expressed on the occasion of the
conclusion and the renewal of the Twelve Years Truce. These were accorded to
different forms of spirituality of Madrid's court. Archdukes Albert and Isabel's
confessors, known in the historiography as a pair working hand-in-hand, expressed
differing opinions. Albert's Dominican confessor, Iñigo de Brizuela, voiced a cautious
view which was aimed to preserve Spanish interests in the Catholic Netherlands. Andrés de Soto, Isabel's Recollect confessor and close to Gracián de la Madre de
Dios, was struggling for the victory of Catholicism. Their political actions and its
reasons will be covered by this pape