Los constantes peligros a los que estaba sometida la vida en la costa justificaron a lo largo de la historia grandes esfuerzos para su vigilancia y defensa. El mar, que por un lado aportaba la riqueza necesaria, por otro ofrecía el riesgo y la inseguridad. En el interfluvio Piedras-Odiel, como en el resto del litoral andaluz, diversos sistemas de defensa fueron desarrollándose a lo largo del tiempo, desde los simples vigilantes a pie o a caballo, equipados con faroles para corresponderse entre sí, hasta la interesante serie de edificaciones defensivas que jalonaban este litoral. El castillo de San Miguel de Arca de Buey, torres almenaras de Punta Umbría o El Catalán, y otras mucho menos conocidas como las del Terrón o Marijata, configuraron el sistema defensivo que procuró, con modestos resultados, la seguridad de poblaciones como San Miguel, El Rincón de San Antón, El Terrón, Cartaya o Lepe.____________________Surveillance and defence of the coast
between the rivers Piedras and Odiel
The great efforts made to guard and
defend the coast throughout history
were justified in the constant dangers
that threatened the life on the coast.
On the one hand, the sea provided
the necessary resources; on the other
hand, it also offered risk and lack of
safety. In the Piedras-Odiel
watershed, as well as all along the
Andalusian coast, several systems of
defence were developed throughout
the years. These systems ranged from
the simple guards on foot or horses,
that used to communicate by means
of lamps, to the interesting defensive
buildings staking out this coast.
Buildings like San Miguel de Arca de
Buey castle, the beacon towers in
Punta Umbría and El Catalán, or even
some less know towers like El Terrón
or Marijata, made up a defensive
system that tried to provide, with
modest results, the necessary safety
to villages like San Miguel, El Rincón
de San Antón, El Terrón, Cartaya or
Lepe