El 80% de la energía producida a nivel mundial tiene su origen en los
recursos fósilesyel desarrollo poblacional e industrial en años recientes hansido
las principales causas dela creciente demanda de estos recursos. De acuerdo
con datos publicados en marzo de 2018 por laU.S. Energy
InformationAdministration[1, 2],a nivel mundial se ha registrado un alza en la
producción y en el consumo de combustibles líquidos derivados del
petróleo(Figura 1), estimando un aumento del 7%hacia el año 2030 en ambos
rubros. Sin embargo, se debe resaltar que al ser un recurso no renovable, el
número de reservas probadas disminuirá de manera importante durante los
próximos años. En el caso de México,el Sistema de Información de Energía [3,
4] reportó una tendencia negativaenel número de reservas probadas
certificadas de hidrocarburos totales, en contraste con mayoresvolúmenes de
ventas de productos petrolíferos como por ejemplo, los combustibles líquidos
para vehículos automotore