Los microorganismos alcalófilos son aquellos que requieren de un pH
alcalino entre 8 y 10 para su sobrevivencia, mientras que los alcalófilos
facultativos son organismos con un pH óptimo de crecimiento de 8 a 10, pero
que tiene la capacidad de desarrollarse en ambientes cercanos a la neutralidad.
Microorganismos con estas características son de gran interés por su capacidad
de producir y liberar enzimas activas en estas condiciones extremas de pH.1
Para sobrevivir en ambientes hostiles, los microorganismos recurren a un
amplio repertorio de herramientas que les permiten desarrollarse y ser
totalmente funcionales bajo estas condiciones. La mayoría de las estrategias de
sobrevivencia tienen relación con la regulación del ion Na+