La fotocatálisis, como método de degradación de
compuestos orgánicos tóxicos en aguas residuales,
usando luz visible y/o ultravioleta y un material
cerámico semiconductor como catalizador, es un
proceso relativamente reciente y novedoso. Este
método ofrece ventajas superiores frente a otras
metodologías, tales como: bajo costo, estabilidad
química del catalizador y la posibilidad de degradar
los contaminantes tóxicos, cuando sus concentraciones
son muy bajas. La parte central del método
fotocatalítico es la manufactura y diseño del catalizador cerámico.
En este trabajo se sintetizó el compuesto
Ba3Li2Ti8O20 por la técnica sol-gel en distintas condiciones
de pH. Porciones de los geles obtenidos
fueron tratadas a diferentes temperaturas hasta lograr
la estructura del compuesto. Las muestras fueron
caracterizadas por espectroscopia de infrarrojo,
difracción de rayos X y análisis térmico. Se calculó
la energía de banda prohibida de los catalizadores,
a partir de sus espectros de absorción UV-Vis.
La descomposición del 2-propanol llevada a cabo
con cada una de las muestras se usó para determinar
la presencia de sitios ácidos y/o básicos en los
compuestos. La actividad fotocatalítica de los materiales
fue evaluada usando como reacción de prueba
la degradación de 2,4-dinitroanilina. El compuesto
ternario Ba3Li2Ti8O20 presentó una actividad
superior a la del TiO2 en la descomposición de 2,4-
dinitroanilina, por lo cual puede proponerse este
catalizador para ser utilizado en la remoción de dicha
sustancia orgánica de las aguas residuales. La
mejor actividad fotocatalítica la presenta el material
obtenido a pH 9, y tratado a 600 y 800ºC cuando
la fase cristalina del Ba3Li2Ti8O20 se ha formado, lo
que indica que la estructura cristalina es un factor
importante que debe ser considerado en el proceso
catalítico