La típica fauna orinoquense, está representada en la literatura y la tradición por los animales que han sido más evidentes al ojo o al oído humanos, o los que con mayor frecuencia figuran en los cuentos, leyendas y temores de la gente, o aquellos que son el blanco más frecuente de. la caza para consumo. Los más conocidos y fácilmente observados en los Llanos Orientales incluyen el venado sabanero |(Odocoileusvirginianus), el chigüiro(Hydróchaeris hydrochaeris), y la corocora roja |(Eudocimusruber). La fauna orinoquense abarca también a uno de los animales con la vocalización más poderosa del reino animal como lo es el araguato o mono cotudo |(Alouattaseniculus) qué puede ser escuchado a varios kilómetros de distancia, |o las diversas especies de guacamayas (Am spp.), cuyas bandadas rompen el silencio de la mañana al dirigirse a sus habituales lugares de alimentación o al atardecer cuando regresan a sus dormideros. También comprende varios animales que se consideran peligrosos para los humanos, como el tigre |(Panthera onca), el güío negro o anaconda |(Eunectes murinus), el caimán del Orinoco |(Crocodylus intermedius) y la cuatronarices |(Bothropsatrox). Por ser las más evidentes y vistosas, las aves son tal vez el grupo de vertebrados que mayor simpatía despierta en el público en general. Igualmente es el grupo de más alta diversidad dentro de los vertebrados, ya que puede superar el millar de especies y subespecies. Esta es la región natural que contiene un mayor porcentaje de la avifauna nacional; no obstante, su estado de conservación deja mucho que desear y los cambios introducidos al medio ambiente, por el desordenado e inconsciente desarrollo agrícola y pecuario, han reducido notablemente las poblaciones de diversas especies y puesto en duda la. supervivencia regional de otras, cuya distribución natural ha tenido en los Llanos una importante zona de alimentación en sus habituales y obligadas rutas de migración transcontinental o regional