La UE ha sentado las bases de una política europea de inmigración integral que abarca cuestiones tales como la gestión positiva de la inmigración y medidas para frenar los flujos irregulares de inmigrantes. Sin embargo, aún estamos lejos de una verdadera política de inmigración común europea, siendo este uno de los retos a los que España se enfrentará durante la Presidencia española en 2010