Hay profesores que dedican una parte de su
tiempo a estudiar cómo funciona el aprendizaje,
cómo mejorar sus clases y sus prácticas, así como
a integrar, motivar y enseñar más y mejor a sus
estudiantes. Utilizan sus capacidades y formación
como investigadores para estudiar y comprobar
teorías, planificar experimentos, analizar
resultados y extraer conclusiones que permiten
aumentar los conocimientos sobre educación.
Estos profesores están investigando en educación.
Sin embargo, no es habitual que este trabajo sea
publicado, ni reclamado como investigación.
Muchas veces, esto es debido a que separamos
ambos mundos sin pensar que la educación pueda
ser investigación. Otras, simplemente no sabemos
dónde publicar, o si estas publicaciones serán
tenidas en cuenta en nuestro currículum. En este
artículo se realizan unas reflexiones sobre la
investigación en educación y su valoración, así
como un estudio sobre los congresos y revistas
donde leer, aprender y, eventualmente, publicar.Peer Reviewe