'Universidad de Alicante Servicio de Publicaciones'
Abstract
Las metodologías de innovación docente han sido potenciadas con la creación del Espacio Europeo de Educación Superior. Uno de los objetivos que persigue la innovación es conseguir que el aprendizaje sea reflexivo. La experiencia educativa es un fenómeno altamente complejo, implica cuatro elementos y que en la descripción de Schwab (1983) son: el profesor, el que aprende, el curriculum y el medio. Como plantean Ausubel, Novak y Hanesian (1983), en la teorización sobre el aprendizaje significativo, los alumnos partiendo de su estructura cognitiva previa, van integrando y relacionando nuevos aprendizajes, haciendo referencia a la “estructura cognitiva", como el conjunto de conceptos e ideas que un individuo posee en un determinado campo del conocimiento y de su organización. Las competencias que tienen que adquirir las futuras enfermeras, tienen su desarrollo epistemológico en un conocimiento fundamentalmente práctico, y que va ser desarrollado dentro de ámbitos complejos como son los entornos clínicos y comunitarios, donde realizan y se aproximan a esos saberes. El conocimiento práctico tiene que estar fundamentado en un aprendizaje reflexivo, abandonando paradigmas más positivistas, donde impere el razonamiento clínico basado en modelos reflexivos que le sirvan para argumentar los cuidados. El objetivo del presente estudio es analizar los estilos predominantes de aprendizaje del alumnado de primero de grado de Enfermería y su evolución cuando cursan el tercer año después de su incorporación a los módulos prácticos. Métodos: estudio de intervención con diseño de grupo único. Para realizar el estudio se utilizó como instrumento de recogida de datos el cuestionario CHAEA que determina los estilos de aprendizaje en ambos cursos