La Comisión de Esclarecimiento de la Verdad debe romper con el esquema dominante que busca un ritual de purificación para 'pasar la página'. Requiere una vocación transformadora de la justicia transicional, de las Comisiones de la Verdad y de la memoria, además de un Gran Diálogo Nacional por la Verdad que supere la reglamentación de la Comisión y que involucre a la sociedad en su conjunto, escribe Diana Gómez (Universidad de los Andes)