En las navegaciones internacionales donde uno de los puertos de
recalada, es una nación tercermundista o en vías de desarrollo, la precariedad, la falta de comida y dinero hace que el polizonaje sea algo común entre los buques que frecuentan dichos puertos. Los capitanes de aquellos barcos que encuentren a bordo de su buque un polizón, tendrán que notificarlo a la autoridad competente en el asunto en el primer puerto de recalada que el capitán considere que se cumplirán con las normativas internacionales vigentes. Son estas autoridades las competentes en repatriar al polizón, si así lo requiere la legislación, pero los costes de dicha repatriación correrán a cargo
del armador del buque
