La significación de Cairasco de Figueroa es múltiple, pues, por un lado, él intenta conciliar el acervo grecolatino y el cristianismo, y por otro lado, porque pensar la clasicidad desde Canarias equivale a forjar un estado de conciencia que, previamente instado como respuesta al presente de una situación, propone una nueva interpretación del pasado. Nos encontramos con el primer autor natural de las islas que es verdaderamente consciente del espacio en que ocurre su inaugural experiencia poética, el descubrimiento de la originalidad, emprender a solas el hallazgo poético de su microcosmos