En nuestras sociedades modernas, caracterizadas por una diversidad plural debido a la migración, así como en nuestras comunidades globales que se han abierto y comunican entre sí gracias a la globalización y a las tecnologías de la información, el ser humano se ha convertido en un intérprete activo de su entorno. Hoy en día, las fronteras entre diferentes culturas y valores han desaparecido, lo que hace que la interpretación sea una acción ineludible en cualquier intento de comunicación o transmisión de información