La necesidad de una nueva Ley Ordenadora de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social era indudable desde la aprobación de la Constitución, pero esta novedad legislativa no se ha producido hasta el pasado mes de noviembre, a través de la Ley 42/1997. Esta tardanza provocó que diversas normas, y especialmente las relacionadas con la prevención de los riesgos laborales, vinieran incidiendo en el régimen jurídico de la Inspección: el presente artículo trata de exponer las repercusiones que en toda esa reciente normativa sobre salud laboral provoca la aparición de la Ley sobre la Inspección