El estudio integral de la Región del Bajío se desglosó en dos partes: la económica y la social. El aspecto económico quedó a cargo del Centro de lnvestigaciones Agrarias, en tanto que del aspecto social se encargó al Instituto Nacional de Antropología e Historia. El presente artículo forma parte del estudio sociológico. Como representativos de la región se tomaron los municipios que componen el Distrito Económico de Celaya. La tenencia de la tierra toma dos formas principales: el ejido y la propiedad privada. De estas dos formas se derivan características de estatus, psiquis, monto y origen de los ingresos. El sexo fue un elemento que no se tomó en cuenta por no ser representativa la muestra. La edad fue distribuida de diez en diez años con objeto de conocer las épocas de mayor y menor actividad o participación. Sin embargo, se encontró que la edad no se relaciona con los otros elementos estudiados. En lo referente al estado civil, la norma es el matrimonio civil-religioso, aun cuando también hay aceptación del matrimonio únicamente por lo religioso, desechándose las otras formas de unión. La movilidad de la población es mínima, aún dentro del mismo Estado. Hay tendencia manifiesta a la estabilidad. La escolaridad es baja en los grupos estudiados (ejidatarios y propietarios), acentuándose en los ejidatarios. Respecto a la filiación religiosa, pese a que la región del Bajío se caracteriza por un grado elevado de catolicismo, encontramos que la tendencia es únicamente a practicar la religión sin llegar al fervorismo, y entre los ejidatarios también hay inclinación hacia la indiferencia religiosa. En la filiación política encontramos, por una parte, tendencia a no pertenecer a ningún partido político, y por otra, la de pertenecer al PRI, entre los ejidatarios principalmente por presión y entre los propietarios por conveniencia, o sea, que de hecho existe el mismo sentimiento: el de no pertenecer a ningún partido político. Las actividades económicas alternantes o complementarias de los ejidatarios y de los propietarios son: aparcería para los primeros y arrendamiento para los segundos; renta y sueldo para los propietarios; el salario predomina entre los ejidatarios; y en el comercio también hay mayor número de ejidatarios, sólo que aquí se trata de pequeños comerciantes