32 pages, 10 figures[EN] The Strait of Gibraltar is a first-order physiographic feature between southern Iberia and northern Africa. It has been excavated over the Arc of Gibraltar in favor of a conjugated ENE-WSW and WNW-ESE fault system that have acted as weakness structures. The Strait was generated by erosive processes of the water masses coming from the Atlantic Ocean in the lower Pliocene, due to the rude and rapid flooding of the Alboran Sea basin. Once the flood stabilized the exchange and interaction of the Atlantic and Mediterranean water masses began as we know it today; the Atlantic water that circulates on the surface of the Strait towards the Alborán Sea, and the Mediterranean water masses that circulate in depth towards the Atlantic Ocean. The acceleration of the Atlantic and Mediterranean water masses in the Strait corridor has favored the development of erosive processes.These processeshave allowed the outcrops of the rocky substratum, the development of sedimentary instabilities and the generation of paleochannels, carbonate crusts and cold-water coral formations during the Pliocene and Quaternary. Likewise, the acceleration of the Mediterranean water masses on their way in and out of the Strait and their interaction with the sea floor have controlled sedimentation both in the Alborán Sea basin and in the Gulf of Cádiz, forming contouritic depositional systems[ES] El estrecho de Gibraltar es un rasgo fisiográfico de primer orden entre el sur de Iberia y el norte de África. Ha sido excavado sobre el Arco de Gibraltar a favor de un sistema de fallas conjugadas de direcciones ENE-OSO y ONO-ESE que han actuado como estructuras de debilidad. El Estrecho fue generado por procesos erosivos de las masas de agua procedentes del océano Atlántico en el Plioceno inferior, al producirse de forma brusca y rápida la inundación de la cuenca del mar de Alborán. Una vez estabilizada la inundación comenzó el intercambio y la interacción de las masas de agua atlántica y mediterránea tal y como hoy la conocemos: el agua atlántica que circula en la superficie del Estrecho hacia el mar de Alborán, y las masas de agua mediterráneas que transitan en profundidad hacia el océano Atlántico. La aceleración de las masas de agua atlántica y mediterránea en el corredor del Estrecho ha favorecido el desarrollo de procesos erosivos. Estos procesos han permitido los afloramientos del substrato rocoso, el desarrollo de inestabilidades sedimentarias, generación de paleocanales, costras carbonatas y formaciones coralígenas de aguas frías durante el Plioceno y el Cuaternario.Asimismo, la aceleración de las masas de agua mediterráneas en su camino de entrada y salida del Estrecho y su interacción con el suelo marino han controlado la sedimentación tanto en la cuenca del mar de Alborán como en el golfo de Cádiz, formando sistemas deposicionales contorníticosWith the institutional support of the ‘Severo Ochoa Centre of Excellence’ accreditation (CEX2019-000928-S)Peer reviewe