Las infecciones nosocomiales son infecciones
contraídas después de 48 horas de estancia en el hospital. Los recién nacidos en cuidados intensivos son los más susceptibles a la infección y cuando ésta se presenta es mucho mas fácil su diseminación que en los
niños mayores. Los adultos que son atendidos en la UCI presentan infección de la vía urinaria en la mayoría de las infecciones nosocomiales; en contraste, en los niños
las infecciones en sangre es el sitio más frecuente. En pediatría el sitio y la distribución de los patógenos varían según la edad y el entorno. Las recomendaciones
para disminuir la incidencia y la distribución de las infecciones nosocomiales incluyen vigilancia prospectiva de las infecciones nosocomiales; análisis
periódico de las tasas de infecciones nosocomiales; tener una base de datos para la toma de decisiones, y la disponibilidad de un epidemiólogo en el hospital para
las estrategias de control de infecciones y políticas a seguir