Nuestro trabajo surge de considerar que la diversidad biológica y la diversidad cultural tienen una interdependencia evidente. El concepto central que manejaremos es el de diversidad biocultural, entendida como la diversidad de la vida en todas sus manifestaciones (biológica, cultural, lingüística) interrelacionadas en un complejo sistema socioecológico (Maffi, 2005). En este marco, las acciones humanas se expresan tanto en la selección de especies y variedades, como en la experimentación y ajuste de las mismas a las condiciones ambientales locales; por lo tanto, in fluyen de forma directa o indirecta sobre la biodiversidad. Estos aspectos, junto con otros en los cuales tienen lugar interacciones entre distintos agentes en las prácticas sociales cotidianas, generan un espacio particular, al que denominamos paisaje.Comisión de Defensa de la Soberanía (UNLP)Facultad de Ciencias Naturales y Muse

Arenas, Patricia Marta

Arrippe, Agustina Ileana

Auge, Melisa Ayelén

Bilyk, Pablo Andrés

Day Pilaría, Fernanda Anabella

Doumecq, María Belén

García Lerena, María Soledad

Ghiani Echenique, Naiquen Martina

López, Cristina

Martínez, María Pilar

Paleo, María Clara

Petrucci, Natalia Silvana

Pochettino, María Lelia

Puentes, Jeremías Pedro

Stampella, Pablo César

Varela, Andrea Mariana

Servicio de Difusión de la Creación Intelectual

Matriz soberanaEL CONOCIMIENTO AMBIENTAL LOCAL EN EL EJERCICIO DE LA SOBERANÍA TERRITORIAL Y ALIMENTARIASaberes, paisaje e identidad en el Parque Costero del Sur (provincia de Buenos Aires)María Lelia Pochettino, María Clara Paleo, Patricia M. Arenas, Melisa Auge, Fernanda Day Pilaría, María Belén Doumecq, María Soledad García Lerena, Naiquen Ghiani Echenique, María Pilar Martínez, Natalia S. Petrucci, Jeremías P. Puentes, Pablo C. StampellaNuestro trabajo surge de considerar que la diversidad biológica y la diversidad cultural tienen una interdependencia evidente. El concepto central que manejaremos es el de diversidad biocultural, entendida como la diversidad de la vida en todas sus manifestaciones (biológica, cultural, lingüística) interrelacionadas en un complejo sistema socio-ecológico (Ma, 2005). En este marco, las acciones humanas se expresan tanto en la selección de especies y variedades, como en la experimentación y ajuste de las mismas a las condiciones ambientales locales; por lo tanto, inuyen de forma directa o indirecta sobre la biodiversidad. Estos aspectos, junto con otros en los cuales tienen lugar interacciones entre distintos agentes en las prácticas sociales cotidianas, generan un espacio particular, al que denominamos paisaje. En el decir de Greider y Garkovich: los paisajes constituyen los ambientes simbólicos creados por las acciones humanas al conferir signicado a la natu-raleza y el ambiente, al dar al ambiente forma y denición  Comisión de Soberaníaa partir de un punto de vista particular y a través de un ltro especial de valores y creencias. (1994, p.1)Para abordar la diversidad biocultural y el paisaje llevamos ade-lante distintas experiencias de trabajo entre el Laboratorio de Aná-lisis Cerámico (LAC) y el Laboratorio de Etnobotánica y Botánica Aplicada (LEBA), ambos pertenecientes a la Facultad de Ciencias Naturales y Museo (UNLP), en interacción con les pobladores del Parque Costero del Sur.El Parque Costero del SurLa Reserva Mundial de Biósfera “Parque Costero del Sur” (PCS) está ubicada en los partidos de Magdalena y Punta Indio, en el noreste de la provincia de Buenos Aires, 60 km al sur de la ciudad de La Plata, y fue creada en el año 1984 para propiciar la conservación de la biodi-versidad, el patrimonio local y el desarrollo sustentable. El PCS po-see un valioso patrimonio biocultural que registra una gran variedad de paisajes y una prolongada ocupación humana. También esta zona es Reserva Provincial, donde la presencia del talar (bosque de Celtis tala Gillies ex Planch.) se conjuga con ambientes de bañados y playas (Ghiani Echenique et al., 2018). En esta zona investigamos el proceso de poblamiento desde apro-ximadamente 2.000 años AP hasta la actualidad, período que incluye el desarrollo de distintas sociedades con sus respectivas percepciones sobre el entorno, saberes y prácticas. Diversos elementos patrimo-niales del PCS dan cuenta de este paisaje en tanto resultado del pro-ceso de interacción entre los grupos humanos y el entorno a lo largo del tiempo. Los sitios arqueológicos constituyen registros de grupos ceramistas que practicaban caza, pesca, recolección y posiblemente desarrollaban actividades hortícolas. Estas poblaciones habitaron el área desde hace 1.800 años AP hasta momentos posteriores al con-Matriz soberanatacto hispano-indígena, y están situados en el bosque de tala formado sobre los cordones conchiles, geoformas elevadas características de la llanura costera rioplatense (Paleo y Pérez Meroni, 2010). A partir de la colonización europea se comienzan a conformar estancias ga-naderas en la zona, las cuales se consolidan hacia nes del siglo XIX (Paleo et al., 2016). Al siglo XX corresponden rasgos dejados por las actividades ex-tractivas desarrolladas en el PCS, como la explotación de materiales calcáreos y la tala del bosque. Sin embargo, la ganadería extensiva, actividad económica principal en la actualidad, favorece la perma-nencia de esta formación vegetal (Arturi y Goya, 2004). Asimismo, algunos centros urbanos dentro del PCS, como la localidad de Punta del Indio, tienen como principal actividad económica el turismo.  La construcción del paisaje: soberanía territorial La implementación de diferentes abordajes complementarios per-mitió aproximarnos a la historia del paisaje en la ribera rioplatense austral, así como analizar cambios y continuidades en la interrelación entre humanos y plantas que habitaron y habitan el área: la arqueo-botánica, la etnobotánica histórica y la etnobotánica actualística. El análisis arqueobotánico de microrrestos hallados en cerámica y ma-terial lítico de momentos prehispánicos (ca. 1.800 AP) permitió iden-ticar el uso de la ora local, junto con vestigios de cultivos de origen americano, y diferentes técnicas de procesamiento (Auge et al., 2019). A través de la etnobotánica histórica, con el análisis de documentos publicados e inéditos, se identicó la incorporación de especies nue-vas e inusuales que modelaron un paisaje rural acorde a los criterios prevalentes en distintos momentos históricos. Finalmente, mediante la investigación etnobotánica, se registraron diferentes visiones acer-ca de las especies nativas e introducidas, así como diversas estrate-gias de conservación, dado que los actores sociales conocen, usan y  Comisión de Soberaníavaloran determinadas plantas exóticas como recursos locales, al igual que lo hacen con especies nativas (Paleo et al., 2016; Pochettino et al., 2017; Auge et al., 2019).A partir del diálogo entre los tres abordajes mencionados fue po-sible apreciar el proceso de construcción del paisaje actual. El bosque de tala y el pastizal se modicaron gradualmente en interacción con las poblaciones humanas. Posteriormente, tuvieron cambios mayores, a causa del avance urbano, así como de la introducción del ganado y es-pecies arbóreas que hoy se perciben como elementos propios y deni-torios de la identidad local para los actores sociales (Paleo et al., 2016).De yuyos y saberes: soberanía alimentariaLa apertura del Centro Comunitario de Extensión Universitaria de Magdalena y Punta Indio (CCEU Magdalena y Punta Indio) en el año 2019 nos incentivó a presentar el proyecto “De yuyos, plantas y saberes. Convivencias e intercambios en el Parque Costero del Sur”. Su objetivo es visibilizar y discutir las distintas valoraciones del patrimonio tangible e intangible vinculado al entorno vegetal por parte de la población del PCS, a partir de la implementación de espacios de encuentro e intercambio de saberes. Para ello, consideramos indispensable una perspectiva transdisciplinaria que integre el conocimiento local y el cientíco (Vessuri, 2008), focalizada en el abordaje de problemáticas locales, y nos posicionamos desde la perspectiva de la Investigación y Acción Participativa. Este marco teórico-metodológico permite el establecimiento de espacios de planicación participativa que reúnen a diferentes personas, pertenecientes al ámbito universitario y a la comunidad local, para denir propósitos, objetivos y metas en conjunto.Entre las actividades planicadas originalmente se incluían reco-rridas de reconocimiento, relevamiento y registro de plantas del PCS y sus diversos usos. Además, planteamos realizar reuniones de discu-Matriz soberanasión acerca de este tema, poniendo en relación la información gene-rada a partir de los trabajos arqueológicos y etnobotánicos realizados en la zona, y otras actividades para visibilizar los temas tratados. Sin embargo, por la pandemia de COVID-19 durante el año 2020 y las medidas dispuestas para todo el país, las actividades tuvieron que ser redenidas y adaptadas a este contexto particular.Si bien este proyecto continúa en desarrollo, podemos destacar como resultados la creación de perles de redes sociales (Facebook e Instagram) para interactuar y comunicar el trabajo conjunto, la con-fección colectiva de materiales de reconocimiento y uso de distintos vegetales en la localidad, en particular los de valor alimentario, y la crea-ción de una gran diversidad de materiales escritos, visuales y sonoros1  asociados a los saberes de la población del PCS respecto a las plantas que les rodean, ya sean nativas e introducidas, pero consideradas “de la zona” por les pobladores, sus usos culinarios, preparaciones, valor nutricional y propiedades terapéuticas. La comunicación de estos re-sultados se dio principalmente por la red social Facebook, la radio comunitaria FM Punta del Indio y la revista El Librito del sur.La contribución de este proyecto radica en la potencial diversi-cación de la dieta a partir del uso de plantas espontáneas o de cultivo marginado. En el complejo e interconectado mundo actual, qué co-memos y cómo se produce está inextricablemente interrelacionado. Según la FAO han sido identicadas alrededor de 30.000 especies de plantas comestibles, de las cuales más de 7.000 se han utilizado en la historia de la humanidad. En la actualidad 30 cultivos proporcio-nan el 90% de las calorías de la dieta humana y sólo cuatro especies (arroz, trigo, maíz, papa) brindan más de la mitad (Silva, 2013). La simplicación agrícola y la pérdida de diversidad de los recursos ali-menticios acompaña la simplicación de la dieta con posibles efectos negativos en la salud de las poblaciones humanas. 1 https://.watch/6baP_OT06V/ Comisión de SoberaníaConocimiento ambiental local: resiliencia, identidad y patrimonioLa etnobiología aborda multidimensionalmente (tiempo, espacio, cultura) las relaciones entre comunidades y ambiente sobre la base de la caracterización del Conocimiento Ambiental Local (CAL), enten-dido como “…el ‘corpus’ acumulativo de prácticas, conocimientos y creencias sobre las relaciones entre los seres vivos (incluidos los seres humanos) y de los mismos con su entorno” (Pochettino y Lema, 2008, p.228). Estas estrategias suelen ser de pequeña escala, diversicadas y se basan en un cúmulo de habilidades especializadas. El dominio de las múltiples habilidades de sobrevivencia es un recurso para la capacidad de recuperación en tiempos de incertidumbre y cambio (Nakashima et al., 2012), por ello el CAL promueve la diversicación y actúa como amortiguador frente a la variabilidad ambiental. Estos saberes locales se suelen transmitir de generación en gene-ración y son recreados de forma constante por los grupos en función de su interacción con el entorno y su historia, aportando al senti-miento de identidad y continuidad, y en consecuencia a promover el respeto por la diversidad biocultural. Esas acciones, en tanto pro-ducción cultural, y la biodiversidad asociada, se convierten enton-ces en patrimonio cultural (Cunha, 2005). Desde esta perspectiva, a través de nuestro trabajo esperamos recorrer los primeros pasos en la patrimonialización de la diversidad biocultural del área de estudio, aportando a la salvaguarda de los recursos vegetales y de los conoci-mientos locales vinculados. Para ello, consideramos insoslayable promover una reciprocidad de saberes entre el ámbito académico y la comunidad local involucra-da. Resulta clave generar instancias de construcción participativa de saberes locales y memoria colectiva que promuevan la valoración del patrimonio, mediante el fortalecimiento de lazos comunitarios e iden-tidades locales y la generación de propuestas en relación al manejo sus-tentable del patrimonio (Paleo et al., 2016). Entendemos que no existe Matriz soberanaconservación de patrimonios naturales sin conservación de saberes, y tampoco existe posibilidad de conservación sin interés comunitario.De este modo, la posibilidad de generar proyectos de conserva-ción de patrimonios bioculturales exitosos, y en consecuencia de ra-ticación y ejercicio pleno de la soberanía alimentaria y territorial, reside en considerar, al momento de la planicación, los intereses de las comunidades y sus formas de relacionarse con el entorno. Referencias bibliográcasArturi, M. F. y Goya, J. F. (2004). “Estructura, dinámica y manejo de los talares del NE de Buenos Aires”. En Arturi, M. F., Frangi, J. L. y Goya, J. F. (Eds.). Ecología y manejo de los bosques de Argentina (pp. 1-24). La Plata: Editorial de la Universidad Nacional de La Plata.Auge, M. A., Doumecq, M. B., García Lerena, M. S., Petrucci, N., Stampella, P.C., y Pochettino M. L. (2019). “e story of landsca-pe in Rio de la Plata region by means of archeobotanical and his-torical evidence” [en línea]. Consultado el 29 de julio de 2021 en <https://docs.wixstatic.com/ugd/696ef4_f4e29b75374d4d0780f-c66302a15f984.pdf>. Cunha, M.C. de (2005). “Introduçao”. Revista do Patrimônio histórico e artístico nacional 32: 15-27. Greider, . y Garkovich, L. (1994). “Landscapes: the social construc-tion of nature and the environment”. Rural Sociology 59 (1): 1-24.Ghiani Echenique, N., Doumecq, M.B. y Pochettino, M. L. (2018). “Saberes botánicos en el talar: utilización de plantas silvestres con nes medicinales y alimenticios en el Parque Costero del Sur (partidos de Magdalena y Punta Indio, Buenos Aires, República Argentina)”. Gaia Scientia 12: 56-80.Ma, L. (2005). “Linguistic, Cultural, and Biological Diversity”. An-nual Review of Anthropology 29: 599-617. Comisión de SoberaníaNakashima, D.J., Galloway McLean, K., ulstrup, H.D., Ramos Cas-tillo, A. and Rubis, J.T. (2012). Weathering Uncertainty: Traditio-nal Knowledge for Climate Change Assessment and Adaptation. Paris: UNESCO, and Darwin, UNU. Paleo, M. C. y Pérez Meroni, M. (2010). “Del bosque de tala al Parque Costero del Sur”. En Berón, M., Luna, L., Bonomo, M., Montalvo, C., Aranda, C., y Carrera M. (eds.) Mamül Mapu: Pasado y pre-sente desde la arqueología pampeana 1, (pp. 215-226). Ayacucho: Editorial Libros del Espinillo.Paleo, M.C., García Lerena, M.S., Stampella, P.C., Doumecq, M.B. y Pochettino, M.L. (2016). La construcción del paisaje del litoral rio-platense 2. Las estancias y sus árboles. La Plata: Editorial Universi-taria de La Plata, Servicop.Pochettino, M. L. y Lema, V. (2008). “La variable tiempo en la carac-terización del conocimiento botánico tradicional”. Darwiniana 46 (2): 227-239.Pochettino, M. L., Paleo, M. C., Paez, M. M., Doumecq, M. B. y Ghia-ni Echenique, N. (2017). “Dos mil años de historia del litoral bo-naerense relatados por el tala. Abordaje interdisciplinar del Celtis ehrenbergiana (Klotzch) Liebm. como patrimonio biocultural a través del tiempo en el litoral bonaerense (República Argentina)”. En Herrera Molina, F., Hurrell, J. A., Tarifa García, F. y Hernández Bermejo, J. E. (eds.), Huellas inéditas del VI Congreso Internacional de Etnobotánica (ICEB 2014), (pp. 159-171). Córdoba: UCO Press.Silva, J. G. de (2013). “Revalorizar el pasado para hacer frente a los desafíos del futuro”. Ambienta 102: 4-11.   Vessuri, H. (2008). “El futuro nos alcanza: mutaciones previsibles de la ciencia y la tecnología”. Conferencia Regional de Educación Superior CRES-UNESCO, Cartagena de Indias, Colombia [en línea]. Consul-tado el 29 de julio de 2021 en <https://www.academia.edu/2653874/EL_FUTURO_NOS_ALCANZA_MUTACIONES_PREVISIBLES_DE_LA_CIENCIA_Y_LA_TECNOLOG%C3%8DA>

El conocimiento ambiental local en el ejercicio de la soberanía territorial y alimentaria : Saberes, paisaje e identidad en el Parque Costero del Sur (provincia de Buenos Aires)

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