El fortalecimiento del vínculo universidad-comunidad es un desafío pendiente para la psicología comunitaria. Para avanzar en esta dirección, sistematizamos prácticas asociadas al vínculo entre estudiantes, equipos docentes, socios comunitarios, comunidades, agencias intermediarias (entre la universidad y socios comunitarios), y grupos de estudiantes. Esto lo hicimos en el contexto de dos cursos sobre diagnóstico e intervención comunitaria que utilizan el método de Aprendizaje Servicio. Desde un enfoque cualitativo, realizamos un grupo focal con seis estudiantes, y entrevistas semiestructuradas con cuatro integrantes de los equipos docentes y cinco socios comunitarios. Para el análisis de los datos utilizamos los procedimientos de la Teoría Fundamentada y llevamos a cabo análisis descriptivo. Como resultados, describimos aspectos relevantes y buenas prácticas asociadas a los vínculos entre estos agentes, a partir de lo cual desarrollamos un material de apoyo innovador para favorecer estos vínculos y así potenciar el trabajo entre universidad y comunidad. Éste consistió en una guía de buenas prácticas, un vídeo tutorial para los socios comunitarios y una presentación para ser utilizada por los equipos docentes en clases. Finalmente, concluimos destacando cómo la formalización de los vínculos entre los agentes involucrados en el Aprendizaje Servicio puede favorecer, tanto la formación integral del estudiantado, así como los servicios ofrecidos a las comunidades. Además, discutimos los aportes de la psicología comunitaria para potenciar el vínculo entre universidad y comunidad en el contexto actual, desde los principios de participación, colaboración, pertinencia local, autonomía, aprendizaje activo, flexibilidad, pensamiento crítico y vocación social